Los manifestantes concentrados en las inmediaciones de la Embajada de Estados Unidos en Irak se han retirado por completo. La legación diplomática está actualmente custodiada por las fuerzas iraquíes, informó este miércoles el mando conjunto de operaciones de ese país.
Los manifestantes habían comenzado horas antes a retirarse del enclave tras la petición en esa dirección de las Fuerzas de Movilización Popular, que les ha invitado a hacerlo «por respeto» a la petición del gobierno iraquí.
Numerosos manifestantes han mantenido asediada en los últimos días la embajada en Bagdad, la que han llegado a atacar con piedras, luego de los bombardeos realizados el domingo por Estados Unidos contra la milicia Kataib Hezbolá, que forma parte de las Fuerzas de Movilización Popular, en Irak y Siria.
«Vamos a pedir a las masas concentradas en la Embajada de Estados Unidos que se retiren por respeto a la decisión del gobierno iraquí, que lo ha ordenado, y para preservar el prestigio del Estado», señaló la organización.
En particular, las Fuerzas de Movilización Popular valoran «la posición del comandante en jefe de las Fuerzas Armadas y de personalidades políticas, religiosas y culturales que rechazan los ataques contra estas». Además, han emplazado a la población a participar en las concentraciones en recuerdo a los «mártires» convocadas en Bagdad y en las demás capitales provinciales.
Fuerte condena
Al menos 31 miembros de Kataib Hezbolá murieron el domingo en bombardeos de aviones de combate estadounidenses sobre cinco objetivos del grupo en Irak y Siria. Kataib Hezbolá está integrada en las Fuerzas de Movilización Popular, una coalición paramilitar proiraní al servicio del gobierno iraquí.
El ataque ha provocado la condena por parte de las autoridades iraquíes, que han advertido que revisarán sus relaciones con Estados Unidos, y masivas movilizaciones populares que han acabado con incidentes en los alrededores de la sede diplomática estadounidense en Bagdad.
Según el comunicado del mando conjunto, las fuerzas iraquíes tienen ya asegurado el perímetro de la embajada, que a su vez ha anunciado la suspensión de «todas las operaciones consulares hasta nuevo aviso» tras los ataques sufridos.
Asimismo, en un comunicado publicado en su cuenta de Facebook, ha recomendado a los ciudadanos estadounidenses que no se acerquen a la embajada, al tiempo que ha recomendado contactar con el Departamento del Estado a los ciudadanos que se encuentren en Irak o a quienes estén preocupados por sus familias en este país. Estados Unidos mantiene abierto su consulado general en Erbil, en el norte del país.