El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró este jueves que su hermano, Pío López Obrador, tendrá que ser castigado si se prueba que cometió delitos electorales al recibir dinero en efectivo para la campaña electoral.
«Si mi hermano es responsable, que lo castiguen. Lo de mi hermano quedó ya muy claro. Yo no he protegido a nadie», dijo el mandatario mexicano en rueda de prensa.
«Yo no establezco relaciones de complicidad con nadie», agregó antes de enfatizar que llegó al poder para «encabezar una transformación y hacerla con todo el pueblo».
Por ello se refirió al fallo del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación para seguir adelante con la investigación en su contra a raíz de unos videos en los que aparece recibiendo dinero de David León, consultor del entonces gobernador de Chiapas, Manuel Velasco.
«Por eso me dieron su confianza millones de mexicanos y no los voy a traicionar», aseveró, según informaciones del diario El Universal. No obstante, el presidente ofreció sus disculpas y recordó que el principal problema de México es la corrupción.
Al hermano del mandatario lo grabaron en 2015 presuntamente recibiendo unos 20.000 dólares destinados a campañas del partido gubernamental Morena como parte de un total de unos 100.000 dólares que habrían entregado durante meses.