La Conferencia Episcopal de Colombia se solidarizó hoy con el pueblo venezolano y se declaró preocupada por la «difícil situación» que vive el vecino país, en donde han muerto unas 13 personas en los últimos días.
«Los Obispos católicos de Colombia manifestamos la cercanía y solidaridad de la Iglesia colombiana con nuestros hermanos y hermanas de Venezuela, preocupados por la difícil situación que atraviesan», indicó la Conferencia en un comunicado.
Además de al menos 13 fallecidos, las protestas en diferentes ciudades de Venezuela han dejado cientos de heridos y más de 550 detenidos, de los cuales 334 siguen privados de libertad, según la ONG Foro Penal Venezolano.
En el texto, los obispos expresaron su «cercanía a los obispos, sacerdotes, religiosos y fieles laicos, que en medio de dolorosas situaciones y privaciones, siguen anunciando el Evangelio y trabajando por el bien de Venezuela, así como por la defensa de los valores humanos y cristianos».
También aseguraron que con el papa Francisco invitan «a evitar toda forma de violencia y a buscar soluciones políticas a los graves problemas del país» e indicaron que no dejarán de «orar con profunda fe y devoción al Señor por la reconciliación, la unidad y el bienestar integral del hermano pueblo venezolano».