El monseñor colombiano Luis Mariano Montemayor acudió a La Parada, en Villa del Rosario, Colombia, para constatar la situación de los migrantes venezolanos que cruzan caminando la frontera.
El nuncio, que estaba junto al obispo de Cúcuta, Víctor Manuel Ochoa Cadavid, y el de San Cristóbal, Mario Moronta, pidió a los venezolanos que no se cansen y que perseveren, reseñó La Opinión de Cúcuta.
Montemayor destacó que el papa agradeció al gobierno de Colombia por la política de puertas abiertas a los venezolanos.
Resaltó que la Casa de Paso Divina Providencia ha tenido que expandirse por la llegada de venezolanos. Actualmente sirven más de 3.500 raciones de comidas a los migrantes venezolanos.
“Esto empezó con pocas cosas, y se va expandiendo. Y digo por desgracia, que va tener que seguir expandiéndose, porque la situación en Venezuela no parece que va cambiar mucho en poco tiempo. Vamos a tener que prepararnos a enfrentar estas necesidades y urgencias con más capacidades”, señaló.
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