LATINOAMÉRICA

La Plataforma Unitaria deplora la persecución de Daniel Ortega contra la Iglesia en Nicaragua

por Avatar EFE

La Plataforma Unitaria deploró este lunes el acoso y la persecución contra la Iglesia católica en Nicaragua y condenó la reciente detención del obispo Rolando Álvarez, un crítico del gobierno de Daniel Ortega.

«La Iglesia católica continúa velando por la defensa de los derechos humanos de todos los nicaragüenses, por lo que consideramos como un suceso de suma gravedad esta persecución contra religiosos que no pretende más que callar las voces críticas contra el régimen de Ortega, intentando ocultar las denuncias que estos han hecho ante la comunidad internacional», dijo la alianza opositora en un comunicado.

A juicio de la oposición, el ataque constante hacia los nicaragüenses y miembros de la Iglesia católica es muestra de lo que hacen los regímenes totalitarios.

Estas acciones, para la Plataforma Unitaria, intentan callar las voces de quienes piensan diferente y que denuncian violaciones de derechos humanos.

La Plataforma Unitaria expresó su solidaridad con los nicaragüenses

La Plataforma Unitaria expresó su solidaridad con los nicaragüenses y los instó a seguir en «la lucha por la libertad». También pidió a la comunidad internacional exigir justicia ante la «gravísima violación a los derechos humanos» y el cese de la persecución religiosa.

El obispo Rolando Álvarez, un fuerte crítico del gobierno de Ortega, fue arrestado el viernes en la madrugada. Se conoce que agentes policiales irrumpieron en la curia episcopal de Matagalpa, donde estaba confinado desde hacía 15 días.

Álvarez, de 55 años de edad, es el primer obispo arrestado desde el retorno al poder de Ortega (2007), cuyas relaciones con la Iglesia católica, la religión y los creyentes en Nicaragua han estado plagadas de fricciones.

En 2022, la Iglesia católica en Nicaragua ha sufrido encarcelamientos o retenciones de sacerdotes, la cancelación de ocho radioemisoras y tres canales católicos, el ingreso por la fuerza y allanamiento a una parroquia, y la expulsión de las misioneras de la orden Madre Teresa de Calcuta.