El ex mandatario peruano Alberto Fujimori, que fue indultado horas antes de la Navidad por el actual presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, no solo quedó eximido de una condena de 25 años de prisión por violaciones a los derechos humanos, sino que también se librará de otro proceso similar que tenía en marcha.
Además del indulto, Kuczynski concedió a Fujimori la gracia presidencial «para todos los procesos penales a la fecha que se encuentren vigentes», según la resolución de su indulto publicada este 24 de diciembre en la edición impresa del diario oficial El Peruano.
Esa gracia presidencial conlleva que Fujimori se salve de ser procesado y juzgado por el caso Pativilca, donde al ex mandatario se le acusa de ser responsable de la matanza de seis personas en 1992 a cargo del grupo militar encubierto Colina.
Los seis fallecidos habían sido detenidos tras irrumpir los militares en sus domicilios en Pativilca, municipio situado en el norte de Lima.
Fujimori ya había sido condenado en 2009 a 25 años de prisión como autor mediato (con dominio del hecho) de otras matanzas similares perpetradas por el grupo Colina, como la de Barrios Altos y La Cantuta, en las que murieron 25 personas también en 1992, además de por los secuestros de un periodista y un empresario ese mismo año.
Esos delitos son considerados de lesa humanidad, por lo que Fujimori no tenía derecho a una eventual reducción de la condena, salvo que el presidente de turno le concediera el indulto humanitario, una gracia extraordinaria para reclusos con enfermedades graves y con riesgo de empeorar por las condiciones carcelarias.
Kuczynski concedió ese indulto a Fujimori horas antes de la Navidad y apenas tres días después de que se salvara de ser destituido por el Congreso gracias a los votos de una decena de fujimoristas rebeldes con su grupo y liderados por Kenji Fujimori, hijo menor del ex presidente, que había pedido a Kuczynski que indultara a su padre.
Fujimori, de 79 años, se encuentra actualmente en una clínica de Lima, donde este domingo recibió la noticia del indulto acompañado de sus hijos, tras haber sido trasladado el viernes desde la prisión donde purgaba su condena, y a la que ya no volverá cuando termine su hospitalización.
Según la resolución de su indulto, Fujimori padece fibrilación auricular paroxística, hipertensión, insuficiencia mitral, cáncer de lengua del que ha sido operado en seis ocasiones y una hernia lumbar.