El presidente Alberto Fernández anunció este viernes, con un mensaje sorpresivo, que se baja de la postulación para intentar ser reelegido en las elecciones de octubre.
La comunicación la hizo en un mensaje que subió a Twitter, en el que señaló, en referencia al 10 de diciembre próximo: “Ese día le entregaré la banda presidencial a quien haya sido elegido” por el pueblo.
Esa decisión era demandada desde hace tiempo por el kirchnerismo, que le pedía que se corriera de la disputa electoral para que Cristina Kirchner pudiera definir la estrategia electoral. Sin embargo, en el pasaje final del mensaje Fernández insiste varias veces con que debe haber una PASO para democratizar el espacio.
La frase del renunciamiento a ser candidato fue la siguiente: “El próximo 10 de diciembre de 2023 es el día exacto que cumplamos 40 años de democracia. Ese día entregaré la banda presidencial a quien haya sido elegido legítimamente en las urnas por el voto popular. Trabajaré fervientemente para que sea un compañero o una compañera de nuestro espacio político que represente a quienes seguimos y seguiremos luchando por una patria justa, con equidad y felicidad para todos y todas”.
A lo largo de un video de más de siete minutos, al que le puso de título “Mi decisión”, Fernández cuenta con voz en off y sobre imágenes de archivo que van desde la época de jefe de Gabinete de Néstor Kirchner hasta el presente, las razones del sorpresivo anuncio. Apeló para ello a un recurso típico del kirchnerismo: un video con anuncio sorpresa, tal como Cristina Kirchner había hecho cuando dijo que él sería su candidato a presidente.
“Esa responsabilidad y compromiso me lleva hoy como presidente de la Nación a estar convencido, sin espacio para ninguna duda, que tengo que concentrar mi esfuerzo, mi compromiso y mi corazón, en resolver los problemas de los argentinos y las argentinas”, señala en un pasaje del video, en lo que parece ser parte de la argumentación para bajarse, una idea que después refuerza al decir: “Nunca antepuse una misión personal a la necesidad del conjunto. Como militante peronista siempre supe que primero estaba la patria, después el movimiento y por último los hombres. Es por esto que voy a cumplir con esta escala de prioridades”.
Después refuerza esa idea al señalar: “El contexto económico me obliga a dedicar todos mis esfuerzos a atender los difíciles momentos que atraviesa Argentina».
La lectura que pareció instalar el presidente es que abandona la carrera presidencial para concentrarse en la gestión de la crisis económica, que tuvo esta semana uno de sus peores momentos, con una fuerte escalada del dólar, mucha inestabilidad financiera e internas políticas que agravaron la incertidumbre.
También da un margen para la ilusión cuando asegura que “vamos a superar esta situación”, que él le atribuye a la sumatoria de los efectos de la pandemia, la guerra en Ucrania y la sequía.
Alberto Fernández tiene agendado concurrir esta tarde a la reunión del Consejo del Partido Justicialista, un ámbito en el que el kirchnerismo preveía volver a presionar para que resignara su candidatura, una postura que también acompañaba Sergio Massa, referente del tercer sector del Frente de Todos.
De hecho la interna política de esta semana, a diferencia de todas las anteriores, no tuvo al kirchnerismo como protagonista. Fue una cruce entre el massismo y el presidente por la filtración de un supuesto plan antiinflacionario que elaboró el exjefe de Asesores, Antonio Aracre, quien debió renunciar tras la polémica.
Esa filtración vino acompañada de rumores sobre una posible salida de Massa del Ministerio de Economía, un dato que generó aún más turbulencia en los mercados, aunque después fue desmentido y que incluso motivó una foto en Olivos del funcionario con Alberto Fernández en un esfuerzo por exhibir distensión.
Aunque anuncia que se corre de la contienda electoral, al mismo tiempo Fernández reafirmó su idea de que las candidaturas deberán definirse a través de unas PASO, una idea que el kirchnerismo no ve con buenos ojos.
“Creo fervientemente en el sistema democrático (…). También debemos usar sus herramientas para la vida partidaria. Por eso creo que las PASO son el vehículo para que la sociedad seleccione los mejores hombres y mujeres de nuestro frente, que mejor nos representen en las próximas elecciones generales. Como presidente del Partido Justicialista voy a garantizar que todos y todas que se sientan capacitados para encarar este desafío puedan hacerlo”. Y después promete casi en tono amenazador: “Créanme que voy a involucrarme directamente para que esto sea posible”.
También plantea una consigna que es la única que aparece sobreimpresa con texto: “Necesitamos revitalizarnos”. Un mensaje que parece dirigido al corazón del kirchnerismo. Desde hace tiempo Fernández viene planteando la idea de dejar el camino despejado para que haya una disputa de liderazgo interno. “Debemos democratizar nuestro espacio. Démosle la lapicera a cada militante”, refuerza después.