El uso de las mascarillas y de los certificados covid en Inglaterra deja de ser a partir de este jueves un requisito legal, tras haber suavizado el gobierno británico las restricciones por la pandemia.
No obstante, las tiendas y los supermercados del país, así como los operadores ferroviarios, indicaron que continuarán pidiendo a los ciudadanos que sigan utilizando las mascarillas pese a los cambios introducidos por el Ejecutivo.
Esas normas fueron eliminadas a raíz del compromiso adquirido por el primer ministro, Boris Johnson, de allanar el camino hacia una «completa normalidad».
Según un portavoz oficial del jefe del líder tory, desde este jueves el uso de mascarillas será «una cuestión de juicio personal».
El gobierno también matizó que las directrices de Salud pública en este país que instan a los británicos a ponerse mascarilla en lugares abarrotados y espacios cerrados en los que están en contacto con desconocidos continuarán.
El alcalde de Londres, el laborista Sadiq Khan, indicó que las mascarillas sí seguirán siendo obligatorias en los servicios de Transporte de la capital al tiempo que urgió a los ciudadanos a «hacer lo correcto».
En cuanto a las organizaciones privadas, estas podrán elegir si exigen la presentación del certificado covid a aquellos que visitan sus instalaciones.
Otras normas para detener la propagación de la variante ómicron del coronavirus, como la instrucción de teletrabajar siempre que se pueda y el empleo de mascarillas por parte de los alumnos de secundaria dentro de las aulas, ya habían sido eliminadas.
La relajación de las restricciones contempladas en el llamado Plan B del gobierno entró en vigor a raíz de una revisión de los datos oficiales la semana pasada, que incluyó la tasa de infecciones, la eficacia de las vacunas, las presiones del covid-19 al sistema público sanitario (NHS), las ausencias laborales, la conducta pública y las valoraciones de los científicos.