Bolivia ha vivido horas de confusión la tarde del miércoles que según el gobierno socialista del presidente Luis Arce se trató de un «golpe de Estado», pero para el líder de la oposición y expresidente de Bolivia Carlos Mesa «hay tal cantidad de incongruencias que tienen que ser esclarecidas».
El autor del supuesto golpe, el hasta ahora general Juan José Zúñiga, poco antes de ser detenido dejó entrever que todo lo que hizo fue en acuerdo con el presidente Arce.
«Habrá que escuchar lo que él (Zúñiga) diga y habrá que explicar al país, desde el punto del gobierno, cómo fue que el presidente se mantuvo pasivo durante dos horas sin decir absolutamente nada. Cómo es posible que las Fuerzas Armadas, en su Alto Mando Militar, no digan ni una sola palabra durante tres horas», señaló Mesa al medio boliviano Telepaís, la noche del miércoles.
Mesa agregó: «Uno queda abrumado por la sorpresa porque esto es un sainete o es un mal chiste o es una conspiración o es una alianza entre el gobierno y las Fuerzas Armadas, pero por supuesto no soy yo (quien) para decir si el señor Zúñiga miente o dice la verdad».
Para el líder opositor que gobernó Bolivia entre 2003 y 2005 «en ese esclarecimiento se verá las connotaciones de conveniencia o no de una parte y la otra. Por ahora lo que nosotros creemos es que lo que hemos vivido hoy es una vergüenza para el país y es un acto que no tiene ningún sentido, no tenía ninguna posibilidad de convertirse en un golpe de Estado que funcionará, pero por supuesto puso en vilo al país entero».
La senadora Andrea Barrientos, de la opositora Comunidad Ciudadana que lidera Mesa, demandó «respuesta a la crisis, no shows ni montajes».
«Primero creemos que la democracia debe precautelarse ante cualquier cosa, pero lo que ha pasado es un show burlesco. Exigimos una investigación, aclaraciones de parte del gobierno nacional y le exigimos que dé respuestas a las crisis. Ya no queremos shows ni montajes», enfatizó Barrientos al portal de noticias Unitel.
La parlamentaria opositora detalló que «no hay gasolina, los productos escasean, sube el dólar y cada vez se agudiza la crisis (…) y en vez de dar soluciones [Arce] monta espectáculos de este tipo que da mucho que pensar».