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La Habana vuelve a tener electricidad tras apagón por el huracán Rafael

por Avatar AFP

La mitad de los habitantes de La Habana ha recuperado la electricidad, aunque vastas áreas de la capital y la vecina provincia de Artemisa siguen sin servicio, a cuatro días de que el huracán Rafael azotara con fuerza el oeste de la isla, dejando a Cuba con un apagón total, informaron las autoridades el sábado.

«La capital está al 48% de cobertura de electricidad» y la provincia vecina de Mayabeque «está al 49%», detalló Lázaro Guerra, director de electricidad del ministerio de Energía y Minas, citado por el portal Cubadebate. En Artemisa, la provincia más afectada, la situación sigue siendo crítica, indicó.

El servicio se restableció desde el viernes en 13 de las 15 provincias del país, pero Artemisa y su vecina, Pinar del Río, seguían sin conexión.

El sábado por la noche, amplias zonas de la capital, de dos millones de habitantes, permanecían en tinieblas, cuando una buena parte de la población también carecía de agua y gas.

Según información oficial, cerca de 500 edificaciones sufrieron derrumbes totales o parciales en la ciudad por el desprendimiento de techos, caídas de muros o de fachadas.

La Habana sufrió un apagón tras el paso del huracán Rafael

Rafael ingresó el miércoles por la pequeña playa de Majana, en Artemisa, con la fuerza de un huracán categoría 3 de las 5 que tiene la escala Saffir-Simpson, y atravesó la isla de sur a norte en casi dos horas y media para salir hacia el Golfo de México, donde se mantiene como tormenta tropical, informó el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos.

El ciclón no provocó pérdidas humanas, pero dejó cuantiosos daños materiales, informaron las autoridades.

El presidente Miguel Díaz-Canel dijo el sábado en su cuenta X que «el restablecimiento de la electricidad y las comunicaciones, el abasto de agua y el saneamiento, constituyen metas principales para este fin de semana» y precisó que dará prioridad a Artemisa.

En poblados de esa provincia contigua a La Habana Rafael arrasó con tejados y casas completas y dejó amplias áreas anegadas. Los cultivos de productos agrícolas que en gran parte consume la capital quedaron severamente dañados.

Rafael golpeó Cuba sólo dos semanas después de la llegada del huracán Oscar, en el este de la isla, durante un apagón anterior que dejó ocho fallecidos y a los 10 millones de cubanos a oscuras. Cuba había sufrido en 2022 otro corte de luz total.

Los apagones son un recordatorio para los cubanos de la frágil situación energética que enfrenta la isla por la caída los últimos dos años de las importaciones de crudo desde Venezuela, su principal aliado. Este petróleo ayuda a alimentar a una parte de los equipos de generación de electricidad que requieren de combustible para operar.

Las centrales termoeléctricas, que funcionan con petróleo doméstico, fallan con frecuencia por el estado ruinoso en que se encuentran, algunas con una antigüedad de hasta 40 años.