La Comisión Interamericana de Derechos Humanos expresó este viernes su «condena al uso excesivo de la fuerza» y los graves desmanes durante las protestas sociales en Chile y subrayó su preocupación por el elevado número de denuncias de violaciones de los derechos humanos.
En un comunicado, la CIDH pidió, además, a las autoridades chilenas que ordenen «el cese inmediato del uso desproporcionado de la fuerza por parte de las fuerzas de seguridad del Estado».
El organismo recordó que la actuación de los Carabineros (policía militarizada) de Chile, en el mantenimiento del orden público, debe estar en «estricto apego» a los estándares internacionales de derechos humanos que rigen el uso de la fuerza bajo los principios de excepcionalidad, proporcionalidad y absoluta necesidad.
Asimismo, la CIDH expresó su preocupación por el elevado número de denuncias de violaciones de los derechos humanos que han recibido los órganos del Estado desde el comienzo de las manifestaciones.
Y expresó su condena por «el uso excesivo de la fuerza» que, según asegura, ha causado 26 muertos, de los que al menos 5 fallecieron por «acción directa» de agentes y 2 bajo custodia del Estado en comisarías de Carabineros.
La CIDH también ha recibido denuncias sobre hechos de violencia sexual, tortura y tratos crueles, inhumanos y degradantes en el contexto de las detenciones.
Específicamente, la Comisión expresó «extrema preocupación» por el elevado número de personas que han sufrido traumas oculares como resultado de los perdigones y balines de goma usados por los Carabineros de Chile.
Según datos del Ministerio de Salud, hasta el 18 de noviembre, las acciones de los Carabineros ha ocasionado más de 200 lesionados oculares, de los que muchos han quedado ciegos.