El Ejército de Israel y las milicias palestinas en la Franja de Gaza reanudaron este viernes el intercambio de fuego, con bombardeos israelíes y cohetes lanzados hacia el área de Jerusalén, tras una noche de calma, en medio de una escalada que ha dejado 32 muertos desde el martes, 31 en el enclave.
«Esta mañana, un avión de las fuerzas israelíes atacó áreas (en la Franja de Gaza) desde las que se realizaron intentos de lanzamiento de cohetes hacia territorio israelí», indicó a EFE un portavoz del Ejército, que poco después informó de un segundo bombardeo sobre «objetivos de la Yihad Islámica».
Fuentes en el enclave costero confirmaron el ataque israelí en Deir Al Ballah, un poblado del sur de la Franja que colinda con el Mediterráneo.
Del lado israelí, las sirenas sonaron pasadas las 11:00 hora local (08:00 GMT) en las poblaciones de Netiv HaAssara, Sdeh Avraham, Holit, Nir Itzhak, Sufa y Yehuda, todas cercanas a la frontera con Gaza, y sus habitantes se refugiaron en búnkeres.
Poco después las alertas sonaron en poblaciones como Beit Shemesh o el asentamiento judío de Gush Etzion -en Cisjordania ocupada-, cercanas a Jerusalén, en el centro de Israel.
Hasta esta mañana, las milicias palestinas habían lanzado 866 proyectiles en esta escalada que hoy entra en su cuarto día de fuego, de los que 672 cruzaron al territorio israelí, según datos del Ejército.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, se encuentra reunido con su gabinete de Seguridad para «una nueva evaluación», indicó su portavoz.
Este intercambio de fuego se produce tras una noche de absoluta calma, después de un intenso intercambio de fuego durante toda la jornada del jueves.
El día finalizó con un bombardeo israelí poco antes de la medianoche (20.50 GMT) sobre la Franja de Gaza, desde donde las milicias palestinas, encabezadas esta vez por la YIP, cesaron los disparos de cohetes hacia las 22.00 horas (19.00 GMT).
Los rumores de un cese al fuego, mediado por Egipto, la ONU y Catar, circulan desde ayer, pero ambas partes del conflicto aseguran que las negociaciones se tornaban «muy difíciles», aparentemente por la negativa israelí a frenar los asesinatos de altos mandos de la YIP, considerada terrorista por Israel, EEUU y la Unión Europea.
Esta escalada bélica comenzó el martes, cuando Israel activó la operación «Escudo y Flecha» con el asesinato selectivo de tres líderes de la YIP -Jalil Bahitini, Tareq Az Aldin y Jahed Ahnam- en intensos bombardeos que se prolongaron durante tres días, matando también ayer a Ali Ghali y Ahmad Abu Daqqa, comandante y subcomandante de la unidad de cohetes del grupo.
Un total de 31 personas han muerto en la Franja de Gaza, de las que al menos 15 eran civiles incluyendo 6 niños, y 106 resultaron heridas, según el recuento del Ministerio de Sanidad del enclave, donde viven 2,5 millones de personas bajo bloqueo militar de Israel desde 2007 y gobernadas por el movimiento islamista Hamás.
Del lado israelí, una persona murió y otras cinco resultaron lesionadas el jueves en Rehovot, al sur de Tel Aviv, cuando un cohete impactó en un edificio residencial. Durante los tres días de escalada, otro puñado de personas resultaron heridas o con crisis nerviosas en Israel.