Indonesia podría cerrar temporalmente una isla que alberga los dragones de Komodo, en un intento por solucionar los problemas creados por el turismo masivo y frustrar los intentos de contrabando del mayor lagarto del mundo, dijo el jueves la agencia local de turismo.
El cierre propuesto, que está a la espera de la aprobación del gobierno central, comenzará a partir de 2020, pero no se aplicará a las islas cercanas donde también se encuentran los carnívoros gigantes, dijo la agencia.
Miles de turistas descienden anualmente en el grupo de islas en la parte oriental de la extensa nación del archipiélago, el único lugar en el mundo donde se pueden ver dragones de Komodo en su hábitat natural.
La isla de Komodo es el hogar de aproximadamente 2.300 dragones, que pueden crecer hasta cerca de tres metros. Un adulto típicamente pesa de 70 a 90 kilogramos.
«El turismo de masas ya está ocurriendo en la isla de Komodo y es realmente inquietante», dijo a la AFP el jefe de la agencia de turismo local Marius Ardu Jelamu.
«Cuando hay demasiados turistas en áreas sensibles como el Parque Nacional de Komodo, los dragones pueden verse afectados negativamente», agregó.
Durante el cierre propuesto, los conservacionistas trabajarán para rehabilitar plantas endémicas y aumentar el número de ciervos, jabalíes y otras presas naturales.
«Queremos que la isla de Komodo sea como las islas Galápagos, por lo que necesitamos rehabilitar la flora y la fauna», dijo Jelamu.
La medida también incluiría cuotas de visitantes más estrictas y un nuevo sistema de emisión de boletos que requeriría que los turistas reserven en línea con anticipación en lugar de pagar en el momento.
El año pasado, el gobernador provincial provocó una controversia cuando propuso cobrar a los visitantes 500 dólares para ver los dragones, aproximadamente 50 veces la tarifa de entrada actual.
Se reforzará la seguridad para evitar que las ofertas saquen de contrabando el lagarto en peligro de extinción, indicó Jelamu el jueves.
La semana pasada, la policía de Java Oriental frustró un intento de contrabandear de cinco dragones de Komodo y arrestó a un grupo de traficantes vinculados con el caso.
Sin embargo, esos dragones no fueron contrabandeados desde el parque nacional, según el Ministerio de Medio Ambiente.
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