El Ministerio de Salud de Irán anunció este domingo el fallecimiento de 542 personas por covid-19 en las últimas 24 horas en el país, lo que supone el dato máximo de decesos diarios desde el inicio de la pandemia en febrero de 2020.
Irán no había superado nunca hasta ahora la barrera de los 500 muertos en un solo día, habiéndose registrado el número más alto de fallecidos en abril pasado, durante la llamada cuarta ola.
Según la portavoz de Salud, Sima Sadat Lari, el total de fallecidos en el país por el coronavirus asciende a 94.015 y el de contagiados, a 4.158.700.
Sadat Lari explicó que desde ayer se contabilizaron 39.619 nuevos casos ,lo que implica también uno de los datos más altos desde el inicio de la pandemia.
Esta quinta ola fomentada por la propagación de la variante delta está poniendo bajo mucha presión a los hospitales, donde a día de hoy hay 6.462 pacientes con coronavirus en las unidades de cuidados intensivos.
La campaña de vacunación va más lenta de lo que habían planeado las autoridades y solo 12,5 millones de personas han recibido al menos una dosis de la vacuna, de una población de más de 80 millones.
El nuevo presidente de Irán, el ultraconservador Ebrahim Raisí, quien tomó posesión del cargo el pasado jueves, ha apostado por «transformar» el modo de luchar contra la pandemia, aunque no ha dado detalles.
La china Sinopharm, la rusa Sputnik V y la británica-sueca AstraZeneca son las principales vacunas empleadas en la campaña de inmunización en Irán, donde también se está produciendo un suero local llamado COV-IRAN Barekat y se va a fabricar el fármaco ruso y la cubana Soberana 02.