La investigación sobre la matanza en un centro comercial de Copenhague, capital de Dinamarca que dejó tres muertos quedó centrada este lunes en los antecedentes psiquiátricos del sospechoso, un danés de 22 años de edad, que publicó videos antes del ataque en los que simulaba suicidarse con armas.
El presunto autor del tiroteo del domingo fue presentado este lunes ante un juez de una corte de Copenhague. El joven compareció vestido con una camiseta azul y escuchó la lectura de un acta de acusación por los asesinatos. Después, la audiencia prosiguió a puerta cerrada.
La policía informó en Twitter que el juez resolvió que el sospechoso quede en detención en una unidad psiquiátrica.
Más temprano el inspector en jefe de la policía de Copenhague, Søren Thomassen, afirmó que el acusado «tiene antecedentes psiquiátricos».
Según la radiotelevisión nacional DR, que citó a varias fuentes anónimas, el presunto atacante intentó conectarse a una línea de atención psicológica poco antes de los hechos, una versión que las autoridades no quisieron confirmar.
El ataque perpetrado con un fusil dejó tres muertos y cuatro heridos de gravedad en el gran centro comercial de Fields, ubicado entre el centro de Copenhague y el aeropuerto.
La matanza dejó en duelo al país que disfrutaba de un fin de semana de ambiente veraniego por el paso del Tour de France y la reanudación del festival de música de Roskilde, tras dos años de covid.
«Creo que pocas veces hemos experimentado un contraste tan violento como ayer», dijo la primera ministra danesa Mette Frederiksen, que acudió al lugar de la tragedia el lunes para rendir homenaje a las víctimas.
La jefa del gobierno admitió que van a emerger discusiones que están justificadas en relación a las armas utilizadas y el cariz psiquiátrico de los hechos.
«Pero hoy creo que debemos rendir homenaje a las víctimas, mostrarles nuestra empatía, nuestra ayuda y nuestro apoyo y sostener a todos quienes resultaron afectados», dijo ante las cámaras.
Las identidades de las víctimas fatales y de los heridos, y el hecho de que fueran de edades heterogéneas y de distintos sexos, hace pensar a los investigadores que el atacante los escogió al azar.
«Nuestra conclusión es que escogió las víctimas al azar», señalo el inspector Thomassen. «No hay indicios de que se trate de un acto terrorista», dijo.
Los tres muertos son un adolescente y una adolescente, ambos de 17 años, y un hombre de 47, detalló la policía.
Este lunes la policía confirmó como auténticos los videos del sospechoso que circulan desde el domingo por la noche en las redes sociales.
En estos se le ve posando con armas, imitando gestos de un suicidio o refiriéndose a un tratamiento con un medicamento prescrito por un psiquiatra «que no funciona».
Las cuentas de YouTube e Instagram del sospechoso fueron clausuradas durante la noche, constató la AFP.
La identidad del sospechoso es conocida, pero no fue publicada por los medios daneses y la policía considera que es prematuro pronunciarse sobre el móvil del ataque, que parece haber sido preparado con antelación.
Cuatro heridos graves
Los cuatro heridos, que están graves, son dos daneses de 19 y 40 años y dos suecos, un hombre de 50 años y una adolescente de 16 años.
Además una veintena de personas sufrieron heridas leves en la estampida que siguió al tiroteo.
En el ataque, el asaltante utilizó un fusil, una pistola y un cuchillo, según la policía, que indicó que no tenía permiso para portar armas.
El sospechoso fue detenido sin dificultad hacia las 17H50 hora local (15H50 GMT) en las afueras del centro comercial, cerca de 15 minutos después de que se escucharan los primeros disparos.
En la zona adyacente al centro comercial había mucha gente, ya que muchas personas habían acudido a un concierto del cantante británico Harry Styles, exintegrante de la banda One Direction, en una sala cercana.
El concierto fue cancelado y el cantante dijo en Twitter que tiene «el corazón roto por la gente de Copenhague».
«Me siento devastado por las víctimas, sus familias y por todos quienes están sufriendo», agregó.