La normalidad volvió a hacer este miércoles acto de presencia en la provincia de Hubei, cuna de la pandemia de coronavirus. En esta ciudad los habitantes pudieron utilizar el transporte público o desplazarse con libertad después de más de dos meses de estricta cuarentena.
La provincia levantó este miércoles todas las restricciones de viaje que había impuesto en sus ciudades excepto en su capital, Wuhan, que hará lo propio el próximo 8 de abril.
El servicio ferroviario volvió este miércoles a emprender la marcha en toda la provincia, con excepción de Wuhan, donde no operará todavía en ninguna de las estaciones de la urbe.
Además, alrededor de 800 personas llegaron a Pekín procedentes de Hubei organizados en trenes especiales al presentar una solicitud para regresar a la capital, donde residen.
Más de 20.000 personas, entre trabajadores y estudiantes, aguardan en Hubei su turno para regresar a la capital.
El servicio urbano de autobús de Wuhan también comenzó a funcionar después de nueve semanas de interrupción, en un momento en el que las cifras oficiales apenas registran nuevos contagios o fallecimientos por la resultante neumonía covid-19.
Los viajeros que quieran usar el transporte público o pedir un taxi deben presentar o bien un código QR generado por el teléfono móvil que certifique su estado de salud o un certificado médico emitido por las autoridades sanitarias locales.
Comienza así una más que relativa vuelta a la normalidad desde que el 23 de enero comenzó una cuarentena que dejó paralizada todo el transporte en la ciudad que no fuera de emergencia.
Al menos 2.526 personas han muerto por covid-19 en Wuhan desde que se detectó el brote, el año pasado, pero 1.358 pacientes todavía permanecen en estado grave.
Cifras que invitan al optimismo
Entretanto, las autoridades sanitarias chinas anunciaron este miércoles que el número de infectados por el coronavirus SARS-CoV-2 «activos» en el país asiático es de 4.287, y continúa en una rápida trayectoria descendente, a pesar de que continuaron registrándose nuevos casos.
Hasta la pasada medianoche se diagnosticaron 47 nuevos contagios, todos ellos en viajeros procedentes del extranjero, y 4 muertes.
Con la suma de las últimas cifras, el número total de infectados diagnosticados en China desde el inicio de la pandemia es de 81.218 pacientes, entre los que han perecido 3.281 personas.
También se ha dado ya de alta a 73.650 personas al haber superado con éxito la enfermedad.
Las cifras de los últimos días han invitado a una paulatina vuelta a la normalidad en las ciudades chinas, siempre bajo estrictas normas de prevención, aunque muchas de ellas han ido relajando sus niveles de respuesta al brote.
Ejemplo de ello, además de una mayor presencia de residentes en las calles, en el transporte público o en los parques, es que la mayoría de los sitios turísticos están ya abriendo sus puertas, aseguró la agencia Xinhua.
Además, el número total de turistas durante el fin de semana pasado aumentó 91% respecto al anterior, de acuerdo con datos de qunar.com, agencia líder de viajes en línea en China.