El aumento de casos semanales de la covid-19 y hospitalizaciones en el sur de Florida llevó al sistema sanitario Jackson Health Care a elevar a «alto» el nivel de amenaza de la pandemia, luego de pasar de tratar a 66 pacientes hace dos semanas a 139 en estos momentos, un aumento del 111 %.
De los 139 pacientes que están siendo tratados actualmente en la red de hospitales públicos del Jackson, la más grande del estado, 95% no están vacunados.
Para seguridad de los pacientes, visitantes y personal sanitario, el sistema Jackson ya no permitirá visitas en la mayoría de sus centros de salud a los pacientes hospitalizados, a partir del próximo 21 de julio, recogió el canal televisivo CBS Miami.
Los casos de contagios de la covid-19 están aumentando en todo el país a medida que la variante delta -de más fácil transmisión- se propaga, lo que ha terminado con meses de disminución constante del número de contagios a medida que progresaba la vacunación.
De hecho, el pasado viernes el número de casos confirmados de la covid-19 en Florida aumentó para esa semana a un ritmo no visto en meses con un total de 45.603 nuevos contagios entre el 9 y 15 de julio, y una tasa de positividad que alcanzó el 11,5 %, según las cifras que ofrece todos los viernes el Departamento de Salud de Florida.
Desde el 1 de marzo de 2020 hasta este viernes se habían registrado en este estado 2.406.809 casos y 38.388 muertes a causa de la covid-19, con 59 muertes durante esta semana y un promedio diario de 6.515 contagios.
En cuanto a la tasa de positividad, esta también se disparó hasta el 11,5 %, frente al 7,8 % de la semana pasada y el 5,2 % de la anterior.
El estado, con una población de 21 millones de habitantes, registra además un total acumulado de 11.292.335 vacunados, con una vacunación semanal de 224.326, algo superior a las 207.089 personas inmunizadas la previa.
Hay unas 3.200 hospitalizaciones por la covid-19, lo que refleja un aumento del 73 % desde el pasado 14 de junio.
Florida tiene ahora la cuarta tasa de hospitalización per cápita más alta de Estados Unidos, solo por detrás de Nevada, Missouri y Arkansas.
La directora de los Centros de Prevención y Control de Enfermedades de Estados Unidos (CDC), Rochelle Walensky, advirtió este viernes que el estancamiento del ritmo de la vacunación en Estados Unidos está haciendo que el coronavirus siga propagándose entre quienes no quieren inmunizarse, y por eso la del país norteamericano se está convirtiendo en «una pandemia de personas no vacunadas».
A medida que se propaga la nueva variante del coronavirus aumentan las preocupaciones entre los expertos y las autoridades, ya que se ha convertido en la más dominante en el país.
La variante delta se ha extendido por diferentes países y, con ella, la preocupación por la difusión de la pandemia dada su elevada capacidad de transmisión.