El diputado Eduardo Bolsonaro, hijo del presidente Jair Bolsonaro, difundió este martes un video en el que explica que está en el Mundial de Qatar 2022 para informar sobre la situación de Brasil tras la victoria electoral de Luiz Inácio Lula da Silva.
El legislador, hijo del mandatario derrotado en las urnas por el líder progresista, fue objeto de duras críticas cuando apareció sonriendo con su esposa en las tribunas del estadio donde la selección brasileña se enfrentó con Suiza, en el Mundial de fútbol.
Su presencia fue revelada por imágenes de la televisión y generó una ola de reprobación que partió sobre todo de los grupos de ultraderecha que apoyan a su padre y que desde hace casi un mes acampan frente a cuarteles del Ejército exigiendo un golpe militar que impida la investidura de Lula, el 1 de enero, y piden a los brasileños que ignoren el Mundial porque es un «momento de lucha».
«Nosotros bajo la lluvia, pasando penurias, y Eduardo Bolsonaro paseando y disfrutando el Mundial», se quejaron muchos manifestantes en las redes sociales, en medio de insultos dirigidos al diputado, que varias veces ha pedido que esas protestas no cesen.
Responde a las críticas
En el video, Eduardo Bolsonaro mostró varias memorias USB que según dijo contienen información sobre la realidad de Brasil que está distribuyendo en Qatar.
«En estos ‘pendrive’ hay videos en inglés explicando la situación de Brasil. Espero que ustedes no crean que aquí en Qatar solo se habla del Mundial», indicó el diputado.
«Recuerden que la FIFA tiene más miembros que las Naciones Unidas» y que «toda la prensa está aquí», afirmó el diputado.
En tono de reproche, respondiendo a quienes le critican, agregó: «¿Será que ustedes no perciben la importancia de la comunicación internacional?».
A diferencia de muchas otras veces en que salió al exterior, el diputado no había informado hasta ahora que había viajado a Qatar.
Sus redes sociales, así como las de su padre, permanecen casi en silencio desde el 30 de octubre, cuando se celebró la segunda vuelta de las elecciones ganadas por Lula.
El presidente Bolsonaro casi no ha salido desde entonces de su residencia oficial, no ha dado declaraciones y solo volvió a asistir a una ceremonia oficial el sábado, cuando participó en un acto militar, aunque permaneció en completo silencio.