El grupo chiíta libanés Hezbolá atacó este martes con misiles teledirigidos y morteros al menos dos objetivos militares de las fuerzas israelíes, después de perder a tres miembros en acciones de Israel contra el sur del Líbano.
El movimiento político y armado chiíta afirmó en un comunicado que los objetivos de su acción fueron dos centros de mando israelíes, e indicó que se trata de una «respuesta inicial» a la muerte de «tres hermanos muyahidines esta tarde como resultado de los ataques israelíes contra los pueblos y aldeas libaneses».
Las Fuerzas de Defensa de Israel dieron otra versión. Aseguraron estar atacando Líbano con artillería tras los disparos de mortero efectuados anteriormente contra el norte de Israel.
Según el ejército israelí, lanzó los ataques contra Hezbolá después de que tropas israelíes se enfrentaron a hombres armados que se infiltraron en Israel desde Líbano. En respuesta, atacaron posiciones de Hezbolá en la frontera. Y fue allí donde murieron los tres miembros del grupo libanés.
Al igual que Hamas, el grupo militante chiita libanés cuenta con el respaldo de Irán.
En la frontera sur de Líbano con Israel se escucharon disparos de artillería, informó un corresponsal de la cadena de televisión Al-Manar de Hezbolá en un mensaje publicado en las redes sociales. La radio del Ejército israelí indicó que el lugar estaba cerca de Adamit, frente a las ciudades fronterizas libanesas de Aalma El Chaeb y Zahajra.
Al-Manar también reportó que los bombardeos de artillería israelí alcanzaron algunos lugares a lo largo de la demarcación de la Línea Azul con Israel sin causar víctimas, y que tuvieron como objetivo campos agrícolas en las zonas de Ayta Shaab, Marwahin, Yarin, Dahira y Raheb, en el sector central de la Línea Azul, precisó.
El portavoz militar jefe de Israel dijo que las tropas restablecieron el control de las comunidades invadidas en el país, pero que continuaban los enfrentamientos aislados porque algunos hombres armados palestinos seguían activos.
“Ahora estamos llevando a cabo registros en todas las comunidades y despejando la zona”, declaró el contralmirante Daniel Hagari.
El ministro de Exteriores libanés, Abdulá abú Habib, indicó previamente que Hezbolá prometió a Beirut que no interferirá en la guerra entre Israel y Hamas a menos de que el ejército israelí acose a Líbano.
En un comunicado en X, el primer ministro libanés en funciones, Nayib Mikati, subrayó que la prioridad de las autoridades es mantener la seguridad en la zona fronteriza, y “detener las violaciones israelíes contra la soberanía libanesa por aire, mar y tierra, y lograr su retirada de los territorios libaneses que aún están ocupados”.
Los enfrentamientos generaron temores de que el conflicto se extienda a otras zonas, además de Gaza.
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