La respuesta del gobierno de Irán a las protestas en el país es «totalmente inaceptable», aseguró este lunes el secretario general de la ONU, António Guterres, que denunció «violaciones masivas de los derechos humanos» y aseguró haber trasladado directamente su postura a Teherán
«Está muy claro que es totalmente inaceptable la forma en que Irán ha reaccionado a las protestas y estamos asistiendo a violaciones masivas de los derechos humanos que condenamos con firmeza», señaló Guterres durante una conferencia de prensa.
El jefe de Naciones Unidas aseguró que ha trasladado sus opiniones en más de una ocasión a las autoridades iraníes y subrayó que toda la situación está muy vinculada a la cuestión de la igualdad de género, que es una de sus prioridades al frente de la ONU.
Desde el inicio de las manifestaciones a raíz de la muerte de Mahsa Amini a mediados de septiembre, la organización ha insistido en que Irán debe respetar el derecho a la protestas pacíficas y ha criticado el uso excesivo de la fuerza por parte de las agencias de seguridad.
Según la ONG Iran Human Rights, en estos tres meses de protestas han muerto ya al menos 400 personas y practicado unas 15.000 detenciones.
Entre los fallecidos hay al menos 44 menores, 34 de ellos por disparos con fuego real en la cabeza u órganos vitales, según Amnistía Internacional (AI).
Ejecución de dos personas
Además, las autoridades iraníes han ejecutado ya a dos personas condenadas por su participación en las protestas, un movimiento también criticado por la ONU y otras organizaciones internacionales.
Por otra parte, Guterres fue preguntado este lunes por la situación del acuerdo nuclear sellado en 2015 por Teherán y las potencias internacionales, cuya restauración se negocia desde hace meses después de que en 2018 fuese abandonado por el entonces presidente estadounidense, el republicano Donald Trump (2017-2021).
Según dijo, ahora mismo existe un «serio riesgo» de perder ese acuerdo por completo, algo que en su opinión «sería un factor muy negativo para la paz y estabilidad en la región y más allá».
Por ello, aseguró que la ONU está haciendo todo lo posible para tratar de salvar el acuerdo, a pesar de que tiene pocas competencias en este ámbito.