Los países miembros del Grupo de Lima presentaron al Consejo de Derechos Humanos de la ONU un proyecto de resolución sobre Venezuela. Allí piden la creación de una comisión que investigue las violaciones de los derechos y libertades fundamentales ocurridas en el país desde enero de 2014.
Mecanismos de este tipo solo son establecidos cuando se considera que la situación de derechos humanos en un país es muy alarmante.
Nueve de los 11 países que integran el grupo (Argentina; Brasil; Canadá; Chile; Colombia; Guatemala; Honduras; Paraguay; Perú; y Guyana) figuran como los principales proponentes de la creación de esa delegación. El proyecto presentado se debatirá la próxima semana en el Consejo de Derechos Humanos (CDH).
El proyecto de resolución solicita a la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos, que dirige Michelle Bachelet, que se asegure de que la comisión investigadora empezará su trabajo de inmediato y que le proporcione los recursos necesarios para este fin.
El periodo inicial de funcionamiento de la comisión será de un año y su periodo de investigación deberá remontarse a principios de 2014. Un época en la que ocurrieron las primeras grandes manifestaciones ciudadanas contra el régimen de Nicolás Maduro.
Posible complementación
De aprobarse la resolución, su mandato incluirá identificar a los responsables de las violaciones de los derechos humanos y formular recomendaciones para que paguen por sus actos, así como cooperar con las autoridades de Venezuela, la sociedad civil, la ONU y la OEA para mejorar la situación.
Al oficialismo se le insta a colaborar con la ONU. Pero esto es considerado poco probable porque el régimen se ha negado sistemáticamente a recibir a expertos y observadores de derechos humanos de la organización internacional. Sin embargo, hubo una excepción con la visita que hizo Bachelet a Venezuela el pasado junio y que fue precedida de una misión de su oficina que preparó el terreno para la misma.