La ministra de Exteriores de España, Arancha González Laya, reiteró en la Conferencia de Seguridad de Múnich la disposición de Madrid a impulsar un acuerdo en Venezuela, en el que el próximo paso debe ser la celebración de elecciones libres.
«Para nosotros lo más importante es que el próximo paso sean unas elecciones libres, abiertas democráticas. Que se respeten los derechos humanos y el imperio de la ley, que es lo que a nosotros en España nos interesa», dijo la ministra a la prensa.
Y agregó: «Todo el que esté en ello, así sea en el gobierno, así sea el presidente encargado (Juan) Guaidó en la oposición, cualquiera que esté apoyando eso se va a encontrar con el apoyo de España».
González Laya dijo que la posición española ha sido siempre clara y que se ha expresado de manera consistente.
«Nosotros apoyamos el que haya una solución construida en Venezuela por actores venezolanos. Una solución que se construya entre todos y todas los venezolanos y las venezolanas», precisó.
El papel de España, de acuerdo con la ministra, es apoyar a veces visiblemente, otras veces de una manera más invisible, algunas veces apoyar con una sonrisa, otras igual con el ceño fruncido el que haya una solución dentro de Venezuela.
«Ese es nuestro objetivo estratégico por una razón muy sencilla, nos unen lazos con Venezuela, con los ciudadanos y las ciudadanas venezolanas. Hay más de 300.000 venezolanos en España. Más de 300.000 españoles en Venezuela y tenemos una posición que quizás es un poquito diferente a la de otros en la UE o a la de otros socios de Latinoamérica o del hemisferio norte, Estados Unidos o Canadá. Tenemos unos lazos específicos», destacó.
España, según González Laya, apoyará a todo el que lance una iniciativa para un acuerdo bajo los parámetros del respeto pleno a los derechos humanos y la democracia.
«Evidentemente hoy no se respetan plenamente los derechos humanos ni se respeta plenamente la democracia. No creo que esté diciendo nada nuevo», añadió.
La funcionaria considera que la posición de España debe ser acompañar ese proceso, no exacerbar las diferencias y buscar que haya un acuerdo entre las partes, así como evitar el enquistamiento del conflicto. «Ya hemos visto en el mundo lo que ocurre cuando los conflictos se enquistan», advirtió.
González Laya dijo que era consciente de que en España el tema de Venezuela había entrado en el debate político doméstico. Añadió que este no refleja la posición del gobierno de Pedro Sánchez que, dijo, los socios internacionales perciben de otra manera.