Este jueves el gobernador de Texas, Greg Abbott ordenó el cierre de seis puntos de acceso en la frontera entre Estados Unidos y México. Sin embargo, seis horas después, informó que su medida fue revocada por las autoridades federales por petición de la administración de Joe Biden.
Abbott le ordenó al Departamento de Seguridad Pública de Texas, a la Guardia Nacional de Texas y a la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos de Texas asegurar la frontera. Pero la administración de Biden cambió a una estrategia diferente y pidió la reapertura, informó Univisión.
“Se cambió a una estrategia que abandona la seguridad fronteriza y, en cambio, facilita que las personas crucen ilegalmente y para que los cárteles exploten la frontera», dijo el gobernador Abbott en un comunicado de prensa citado por el medio.
A pesar de que se revocó su orden, Abbott insistió en que el Departamento de Seguridad Pública de Texas y la Guardia Nacional de Texas mantengan su presencia en los puertos.
El gobernador criticó a la administración de Biden y consideró que es la responsable por la crisis de inmigrantes que han llegado masivamente a la frontera. «La administración Biden está en completo desorden y está manejando la crisis fronteriza tan mal como la evacuación de Afganistán», dijo el gobernador.
Univisión detalló que en la frontera hay alrededor de 8.400 inmigrantes. Las personas están esperando bajo un puente internacional en Del Río para ingresar al país.