Francia condenó la muerte del militar venezolano Rafael Acosta Arévalo, quien se encontraba detenido y acusado de planear un golpe contra Nicolás Maduro, y reclamó «una investigación independiente» para aclarar las circunstancias en que se produjo.
La portavoz del Ministerio francés de Exteriores señaló: «Garantizar la integridad física de los detenidos es responsabilidad de cualquier Estado. La tortura y otros tratamientos crueles, inhumanos y degradantes constituyen una violación de los derechos humanos».
La portavoz insistió en que Venezuela debe respetar sus compromisos internacionales al respecto. Además, manifestó el apoyo de Francia a la acción de la alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, para que en Venezuela se respeten plenamente los derechos fundamentales y pidió «la liberación plena y completa de todos los presos políticos».
El capitán Acosta Arévalo fue detenido el pasado 21 de junio por agentes de la Dirección General de Contrainteligencia Militar y luego murió el 29 en la mañana debido al mal estado físico en que habría sido dejado por sus captores.