Tras el velorio el día anterior y una ceremonia privada bajo tradiciones militares, este viernes en la tarde se realizó el entierro de Ronald Ojeda.
El exteniente venezolano fue despedido en un día caluroso y soleado, bajo las dependencias del Cementerio Parque Canaán de Pudahuel y justo a una semana de encontrarse su cadáver. El ex preso político había sido secuestrado en el hogar que compartía con su esposa e hijo en un sector de la capital chilena.
Dos autos y un retén móvil de Carabineros hicieron guardia a las afueras del recinto, con un grupo de casi diez uniformados patrullando la entrada.
Aal acto asistió más prensa que familiares, que no eran más de 30 personas, incluidos sus amigos, gran parte de ellos exmilitares venezolanos.
El cortejo fúnebre se hizo paso entre los caminos del cementerio. Su esposa y su hermana mayor a cada lado del ataúd. A pocos metros, un trompetista le rendía honor con una retreta militar.
Sobre el ataúd reposaba una camisa de las Fuerzas Armadas, un símbolo del Ejército venezolano con la frase «forjador de libertades», y una bandera de Venezuela.
«¿Por qué le sucedió esto a Ojeda Moreno? ¿El asilo será bueno o malo para un militar perseguido político venezolano?», planteaba una de sus familiares en un escrito.
Camino al área del sepulcro, uno de los fotógrafos de la prensa fue empujado por un asistente, enojado por la intromisión del periodista, quien por sacar fotos más de cerca empezó a entorpecer la ceremonia.
Palabras de despedida para Ojeda
Una vez instalados, la primera en pronunciar palabras fue su hermana mayor, quien contó que Ronald era el menor de diez hermanos, de los cuales dos nunca dieron a luz, pero ella recalcaba que de todas formas los contaba.
«De crianza somos ocho, me quitaron uno», expresó.
Frente a una docena de cámaras, la mujer se dirigió a los chilenos. Aseguró que la muerte de su hermano fue obra del régimen de Nicolás Maduro.
«Mi hermano murió siendo torturado», manifestó.
Emplazó al subsecretario de Interior chileno, Manuel Monsalve, por el acuerdo llevado a cabo entre ambos países.
«Hagan una alianza con una dictadura, avalen una dictadura», manifestó con enojo.
Denunció a Carabineros por su actuar el día del secuestro, pues según ella uniformados se habrían burlado al explicar que Ronald fue llevado por venezolanos haciéndose pasar por la Policía de Investigaciones (PDI).
«Total negligencia de Carabineros. Carabineros se burlaban», señaló la hermana.
Tras eso vinieron las palabras de la esposa, quien pidió que «los encargados de la investigación digan la verdad», y que los chilenos no seamos «cómplices» de lo ocurrido.
«Quiero que mi esposo sea recordado como un héroe, porque eso es lo que fue», dijo.
Un amigo de Ojeda que se acercó al micrófono lo recordó con nostalgia: «Hoy te despedimos aquí en esta tierra lejana, con la convicción de que algún día volverás a tu amada tierra».
Tras los discursos, se realizó un minuto de silencio y se rezó un padrenuestro y un avemaría. Una vez concluido el sepelio, se solicitó privacidad para los familiares, que se quedaron unos minutos recordando al exteniente.