El gobernador de Florida, Ron DeSantis, dijo el martes que ese estado realizará su propia investigación y buscará cargos más duros contra el hombre sospechoso de intentar dispararle a Donald Trump, probablemente incluyendo intento de asesinato.
De Santis también describió los cargos por posesión ilegal de armas de fuego, con los que fue acusado el sospechoso el lunes, como inadecuados.
El gobernador republicano dijo además que asignará la investigación del plan de asesinato a la oficina de la fiscal general de Florida, Ashley Moody, en parte debido a su desconfianza en la capacidad de las agencias federales de permanecer neutrales en los casos relacionados con Trump.
«En mi opinión, no es lo mejor para nuestro estado o nuestra nación que las mismas agencias federales que buscan procesar a Donald Trump lideren esta investigación», dijo DeSantis en una conferencia de prensa.
Ryan Routh fue detenido después de huir del club de Trump en West Palm Beach, donde el expresidente estaba jugando al golf el domingo cuando los agentes del Servicio Secreto descubrieron un cañón de rifle que sobresalía de una línea de árboles y abrieron fuego contra el sospechoso.
Routh, de 58 años, fue acusado de posesión de un arma de fuego como delincuente convicto y de posesión de un arma de fuego con el número de serie borrado en su primera comparecencia ante el tribunal.
DeSantis dijo que Florida irá más allá. «Tenemos jurisdicción bajo la ley estatal para llevar a cabo una investigación y un procesamiento por el delito más grave y fácilmente demostrable, que sería el intento de asesinato, que implicaría una pena máxima de cadena perpetua», afirmó.
«Si hacemos cualquier cosa menos aplicar todo el peso de la ley en esto, entonces creo que estamos enviando una señal de que tal vez esto no sea tan malo. Y eso es inaceptable».
Mientras tanto, el fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, dijo que todo el Departamento de Justicia, incluido el FBI y la Fiscalía de Estados Unidos para el Distrito Sur de Florida, que está procesando el caso Routh, están «coordinando estrechamente» con los socios policiales locales y estatales.
Si bien la fiscal general de Florida enfatizó que realizar una investigación paralela «no significa que sea una guerra territorial» con las autoridades federales, se hizo eco de las preocupaciones de imparcialidad de DeSantis.
Moody, de pie al lado de DeSantis, también afirmó que Florida investigará cómo las cosas salieron «terriblemente mal».
«Se permitió que alguien permaneciera en la periferia de un campo de golf en una arboleda durante 12 horas y se acercara a 150 metros» del expresidente, agregó.
The State of Florida is conducting its own investigation into the second attempted assassination of former President Donald Trump. It is not in the best interests of our state and nation to have the same federal agencies seeking to prosecute Trump leading this investigation.
As… pic.twitter.com/l61XCoe0ls
— Ron DeSantis (@GovRonDeSantis) September 17, 2024