La Fiscalía de Perú anunció este jueves la apertura de una investigación al cuestionado ministro de Defensa Walter Ayala, centro de una tormenta política en el Congreso sobre supuestas presiones para ascender a oficiales militares afines al gobierno izquierdista del presidente Pedro Castillo.
«La investigación preliminar contra el ministro de Defensa, Walter Ayala Gonzales, y los que resulten responsables es por la presunta comisión de los delitos de abuso de autoridad y patrocinio ilegal, previstos y sancionados en el Código Penal», precisó el Ministerio Público en un comunicado.
El caso se abrió «luego de realizar un exhaustivo y riguroso análisis de todas las declaraciones públicas formuladas por los exaltos oficiales, así como del titular de Defensa, en torno a los últimos ascensos en las Fuerzas Armadas», indicó la Fiscalía para justificar su decisión.
La investigación incluye al secretario general de la presidencia peruana, Bruno Pacheco, mencionado por exjefes militares como intermediario de las presuntas presiones políticas del gobierno.
Ministro de Defensa presentó su renuncia
La Fiscalía anunció que recogerá los testimonios de los exjefes del Ejército y la Fuerza Aérea José Vizcarra Álvarez y Jorge Chaparro, respectivamente, a quienes el gobierno jubiló anticipadamente por oponerse a las presiones.
El ministro de Defensa presentó el lunes su renuncia por este caso, pero el presidente Castillo no ha confirmado si acepta la dimisión de Ayala, un exjuez de 50 años de edad.
De aceptarla, sería el décimo ministro que pierde Castillo en poco más de 100 días en el poder.
Castillo removió hace cuatro días al comandante del Ejército, general José Vizcarra, y al jefe de la Fuerza Aérea, general Jorge Chaparro. Ambos afirmaron que sus salidas se debieron a roces con el ministro Ayala y con Pacheco, quienes -afirman los oficiales- les pidieron ascender irregularmente a oficiales afines al gobierno.
El Congreso, controlado por la oposición derechista, anunció su propósito de interpelar a Ayala, lo que probablemente conduciría a que el ministro sea censurado por la mayoría y a su salida del cargo.
Los dos jefes militares removidos habían sido designados por Castillo hace tres meses.
Castillo, en el poder desde el 28 de julio, derrotó por estrecho margen en un balotaje a la derechista Keiko Fujimori, lo que levantó temores en parte de los peruanos de un giro brusco hacia el socialismo tras décadas de políticas liberales.