La Fiscalía de Paraguay anunció este miércoles que abrirá una investigación sobre el ingreso al país en mayo pasado de un avión venezolano-iraní actualmente retenido en Argentina bajo sospecha de posibles vínculos con el terrorismo.
El Ministerio Público informó en Twitter que la fiscal general de Paraguay, Sandra Quiñonez, dispuso iniciar una investigación, «a fin de indagar los hechos ocurridos y determinar las conductas que pudieran tener relevancia penal».
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El proceso, explicó el ente investigador, responde a una comunicación de un funcionario de la subdirección de seguridad de la Dirección Nacional de Aeronáutica Civil (Dinac).
Previamente, el presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez, había anticipado en Twitter que su gobierno denunciará este hecho ante la Justicia y presentará «elementos relativos al caso del avión iraní».
El mandatario, que delegó esa responsabilidad en el ministro de la Secretaria Nacional Anticorrupción (Senac), René Fernández, dijo esperar que «los hechos sean investigados y esclarecidos».
El avión de la empresa iraní Mahan Air, que actualmente pertenece a Emtrasur, filial del estatal Consorcio Venezolano de Industrias Aeronáuticas y Servicios Aéreos (Conviasa), aterrizó el 13 de mayo pasado en suelo paraguayo.
Salió del país el 16 de mayo con una carga de cigarrillos con destino a Aruba.
Consultado al respecto, Fernández dijo a la cadena ABC Cardinal que para el Ejecutivo hay indicios de la «existencia de los hechos punibles de asociación terrorista y financiamiento del terrorismo».
El funcionario explicó que buscarán se esclarezcan los hechos vinculados a una operación de comercio exterior con elementos «atípicos» y también la presencia en el país de personas relacionadas «con organizaciones terroristas internacionales».
Este martes, el ministro del Interior, Federico González, confirmó que los tripulantes del avión, 7 iraníes y 11 venezolanos, fueron acompañados por una escolta policial hasta su hotel en la localidad Ciudad del Este, en la frontera con Argentina y Brasil.
González explicó que en el aeropuerto Guaraní, adonde aterrizó la aeronave, existe «un protocolo de acompañamiento» de las delegaciones extranjeras debido a que trasladan divisas.
Por su parte, el presidente de la Dinac, Félix Kanasawa, admitió el martes que uno de los funcionarios destituidos a raíz del caso no informó a la Secretaría Nacional de Inteligencia sobre la llegada del avión, por lo que está en un proceso de investigación.