Danabel Durán, venezolana de 25 años de edad, perdió a una de sus trillizas recién nacidas a causa de un parto prematuro en Cartagena de Indias, Colombia.
Las pequeñas nacieron el pasado 16 de agosto con tan solo 6 meses de gestación y pesando cada una entre entre 800 y 850 gramos. Los médicos advirtieron del alto riesgo de no concluir su desarrollo prenatal.
Haroldo José Arrieta, pediatra de la Clínica de Maternidad Rafael Calvo, explicó que una de las trillizas que logró sobrevivir «presenta hemorragia intraventricular grado II y hemorragia pulmonar masiva, por lo que se encuentra muy delicada».
El especialista señaló que la otra sobreviviente, a pesar de que se encuentra grave, «está un poco más estable» que su hermana.
Danabel y su esposo Rony Vera, de 32 años de edad, viven en una humilde vivienda en el Mirador de la Bahía, en los Cerros de Albornoz, junto con tres hijos varones de 8, 6 y 2 años. Llegaron a Colombia huyendo de la crisis que padece Venezuela.
A pesar de que la familia lleva más de un año y medio en el país vecino, hasta el momento no cuentan con un documento que regularice su estatus migratorio. Por esta razón no pueden acceder a ninguna ayuda del Estado como servicios de salud.
Mientras la mujer cuida a los menores, Rony sale todas las madrugadas a la calle para reciclar materiales.
Durán pidió a las autoridades mejores oportunidades de trabajo para poder ayudar a su familia y paliar la precaria situación que los ha perseguido hasta Colombia.
La gerente de la clínica, Heyliana Guzmán López, detalló que en el primer semestre de este año se han atendido 2.142 urgencias, 283 partos y 179 cesáreas de personas migrantes.
Al país han llegado más de 1,4 millones de venezolanos, según cifras de Migración Colombia divulgadas el pasado 1° de agosto.
Cerca de 40.000 familias se han radicado en Cartagena, la mayoría de ellas en los sectores más deprimidos de la ciudad y en condiciones de pobreza.