El éxodo de migrantes desde Venezuela se está acercando a un “momento de crisis”, comparable con los eventos que involucran a migrantes en el Mediterráneo, dijo Acnur, la agencia de refugiados de Naciones Unidas.
Cada vez más venezolanos huyen del colapso económico y del malestar político en Venezuela, amenazando con sobrepasar a países vecinos.
Autoridades de Colombia, Ecuador y Perú se reunirán la semana próxima en Bogotá para buscar una salida a la crisis.
El portavoz de la Organización Internacional para las Migraciones, Joel Millman, dijo que deben movilizarse fondos y medios para gestionar las salidas de venezolanos.
Andrej Mahecic, portavoz de Acnur, afirmó que los gobiernos habían hecho esfuerzos admirables, pese a que las capacidades de recepción y servicios están colapsadas.
“Esa creciente estigmatización de aquellos que se ven forzados a huir también pone en riesgo los esfuerzos para su integración”, afirmó Mahecic.
Millman señaló: “Lo que es una situación difícil puede convertirse rápidamente en una crisis”, aunque alabó el “trabajo magnífico” de los países latinoamericanos a la hora de recibir a los venezolanos.
“Vemos los brotes de violencia en Brasil contra venezolanos en Pacaraima y las medidas restrictivas de algunos gobiernos, con la exigencia de pasaportes para la entrada en Ecuador y Perú, como una alerta temprana de que una situación difícil puede convertirse en una crisis muy rápidamente y tenemos que estar preparados”, dijo el portavoz.
“Recalcamos que muchos inmigrantes, particularmente adolescentes y menores de edad, no tienen acceso a esos documentos de identificación”, añadió.
Según la OIM y Acnur, aproximadamente 2,3 millones de venezolanos viven actualmente fuera de su país.
Más de 1,6 millones de personas han salido desde 2015 de Venezuela y 90% se encuentra en países de América Latina.
Desde 2015 aproximadamente 500.000 venezolanos han recibido algún tipo de estatus de residencia formal en América Latina, según la OIM.
Los máximos responsables de la OIM, William Lacy Swing, y de Acnur, Filippo Grandi, expresaron su solidaridad con los países que acogen a los venezolanos que abandonan su país, y pidieron a la comunidad internacional más apoyo con los países latinoamericanos y a las comunidades dentro de ellos que acogen a estos ciudadanos.
El portavoz de Acnur, Andrej Mahecic, expresó su preocupación por los recientes actos de violencia y manifestaciones xenófobas contra los inmigrantes en algunos países de América Latina y el Caribe, porque “aumentan la estigmatización y ponen en riesgo los esfuerzos de su integración”.
Dijo que en 2016 hubo algo más de 30.000 peticiones de asilo de venezolanos en la región y en 2017 ya fueron 100.000 solicitudes. En lo que va de año ya son más de 130.000 peticiones.