Al menos 14 personas murieron y otras más resultaron heridas este domingo en un ataque contra una iglesia protestante en la región del este de Burkina Faso.
«Este ataque desgraciadamente causó 14 muertos y numerosos heridos», declaró el gobernador de la región del este, coronel Saïdou Sanou, en un comunicado.
El ataque tuvo lugar en la tarde en Hantoukoura, un pueblo situado en la provincia de Komandjari. Hombres armados no identificados irrumpieron y dispararon en una iglesia protestante, mientras los fieles se encontraban reunidos durante la misa dominical.
Los asaltantes ejecutaron fríamente a los civiles, incluso, al pastor de la iglesia, según una fuente de seguridad contactada por EFE.
«Los niños no se salvaron», añadió la misma fuente durante su declaración.
El gobernador aseguró que «las fuerzas de defensa y de seguridad lanzaron una operación para socorrer a las personas heridas y emprendieron un rastreo de la zona».
El 23 de abril asesinaron a un pastor en la región del Sahel y cinco días más tarde Burkina Faso sufrió el primer ataque a una iglesia. Seis personas resultaron muertas por un grupo de hombres armados que atacó una iglesia protestante también en la región del Sahel.
Más ataques a otras iglesias
En mayo dos iglesias católicas fueron atacadas. y mataron a cuatro católicos cuando portaban una estatua de la virgen María en una procesión en la región centro-norte.
El terrorismo en Burkina Faso comenzó en abril de 2015. Miembros de un grupo afiliado a la red Al Qaeda secuestraron a un guardia de seguridad rumano en una mina de manganeso Tambao; aún sigue desaparecido.
Desde entonces va en aumento el número de ataques atribuidos a grupos afiliados a Al Qaeda y al Estado Islámico.
La región más afectada por esta creciente inseguridad es la del Sahel, situada en el norte y que comparte frontera con Malí y Níger, siendo un foco habitual de ataques armados y secuestros.
Burkina Faso es uno de los cinco países que componen la fuerza transfronteriza conjunta G5 Sahel, junto con Mali, Mauritania, Níger y Chad, con el objetivo de combatir el terrorismo yihadista en la región.