Alberto Paniz-Mondolfi, especialista venezolano en Microbiología y Virología, y director asistente del laboratorio de Microbiología del Icahn School of Medicine del Mount Sinai Hospital, en Nueva York, junto con su equipo de investigadores del departamento de Patología y Medicina Molecular y Celular, lograron las primeras imágenes microscópicas del virus SARS-CoV-2 en el cerebro.
Este descubrimiento es un aporte que se suma a la secuenciación del genoma del virus.
Paniz-Mondolfi, en exclusiva para El Nacional, dijo que junto al equipo que lidera logró documentar «la presencia del virus en tejido cerebral y cómo accede a través de las células endoteliales de la barrera hematoencefálica».
La muestra se tomó mediante un microscopio electrónico que permitió alcanzar mayor amplificación que el microscopio óptico. Le facilitó a los investigadores ver en mayor resolución la estructura del virus y su relación con los distintos elementos celulares.
Esta es la primera vez que se comprueba el virus SARS-CoV-2 en el cerebro, dijo el científico venezolano, que precisó que «fue una mezcla de espionaje médico y un hallazgo afortunado, valioso e inesperado».
Complicaciones neurológicas
Un estudio del científico venezolano, publicado el 21 de abril en la revista Journal of Medical Virology al que El Nacional tuvo acceso, indica que el SARS-CoV-2, el agente causante de la enfermedad covid-19, puede dar paso a complicaciones neurológicas.
Las secuelas neurológicas pueden ser complicaciones devastadoras de las infecciones virales respiratorias. El informe explica la presencia de virus en las células endoteliales neurales y capilares en el tejido del lóbulo frontal obtenidas en el examen post mortem de un paciente contagiado por el virus SARS-CoV-2.
«Nuestras observaciones de virus en el tejido neural, junto con correlatos clínicos de empeoramiento de los síntomas neurológicos, allanan el camino para una comprensión más cercana de los mecanismos patogénicos subyacentes a la participación del sistema nervioso central», detalla el estudio.
Dada la dimensión global de la pandemia actual, la investigación destaca la necesidad de considerar el posible impacto a largo plazo del covid-19. Podría incluir trastornos neurológicos y neurodegenerativos.
El hallazgo post morten
El paciente fue un hombre hispano de 74 años años de edad, con Parkinson. Ingresó a un centro hospitalario de Estados Unidos por presentar fiebre y confusión. Luego de realizarle la prueba de diagnóstico resultó ser positivo al covid-19.
El hombre fue tratado con hidroxicloroquina oral y enoxaparina subcutánea. Durante los días de hospitalización estuvo consciente intermitentemente, con episodios de hipotensión y febril. También presentó problemas de conducta, alteración de su estado de conciencia hasta que falleció.
Gracias al equipo multidisciplinario de los patólogos Clare Bryce, Zachary Grimes, Mary Fowkes, advertidos del comportamiento neurológico del hombre fallecido, junto con los virólogos Alberto Paniz-Mondolfi, Ronald E. Gordon, Jason Reidy, John Lednicky y Emilia Mia Sordillo logró documentar la presencia del virus SARS-CoV-2 en el cerebro humano.
«Nos impresionó ver la presencia del virus dentro de la célula endotelial, células que recubren el interior de los vasos sanguíneos y capilares. Este entraba y salía de la célula. Se presume que el virus entra al cerebro en un proceso de transporte celular que se llama transcitosis», explicó el virólogo venezolano.
La microscopía electrónica de transmisión de secciones obtenidas en el examen post mortem reveló la presencia de partículas virales de 80 a 110 nanómetros en secciones del cerebro del lóbulo frontal, precisa el estudio de Paniz-Mondolfi, que también preside en Venezuela la Incubadora Venezolana de la Ciencia y el Instituto de Investigaciones Biomedicas IDB.
SARS-CoV-2 ataca al cerebro
Médicos de todo el mundo en otros estudios sugieren que el nuevo coronavirus también puede atacar el cerebro y el sistema nervioso central. Estos especialistas han tratado a pacientes que estaban enfermos por covid-19 y al mismo tiempo sufrían de encefalitis inflamatoria cerebral o convulsiones. Algunas de estas personas, al resultar contagiadas por el SARS-CoV-2, perdían brevemente el conocimiento, mientras que otras sufrían derrames cerebrales o perdían el sentido del olfato.
Un reciente estudio de Japón informó sobre rastros del nuevo coronavirus en el líquido cefalorraquídeo de un paciente con el covid-19 que desarrolló meningitis y encefalitis.
No obstante, hay que tener en cuenta que existen otros factores que pueden estar dañando el cerebro. Por ejemplo, una tormenta de citoquinas podría causar inflamación cerebral, y una tendencia exagerada a la coagulación de la sangre podría desencadenar accidentes cerebrovasculares.
Los coronavirus
Los coronavirus son el grupo más grande de virus que causan infecciones respiratorias y gastrointestinales. Han sido responsables de tres pandemias en los últimos 18 años: SARS en 2002/2003, síndrome respiratorio del Medio Oriente (MERS) en 2012 y, actualmente, covid-19.
El SARS-CoV-2, el agente etiológico del covid-19, es un miembro nuevo de la familia humana de coronavirus que surgió en China en diciembre de 2019.
Debido a que el síndrome respiratorio agudo es la característica distintiva del covid-19 grave, la mayoría de los estudios iniciales sobre la enfermedad se han centrado en su impacto en el sistema respiratorio. Sin embargo, la evidencia acumulada sugiere que el SARS-CoV-2 también infecta otros órganos y puede afectar varios sistemas del cuerpo.
Desde 2020 científicos ya han notado estos hallazgos emergentes que requieren investigaciones sobre las consecuencias a corto y largo plazo de covid-19 más allá del sistema respiratorio.