El gobierno de Estados Unidos reconoció a la senadora opositora Jeanine Áñez como presidente interina de Bolivia luego de la renuncia de Evo Morales.
“La presidente en funciones del Senado, Áñez, ha asumido las responsabilidades de presidente interina de Bolivia», escribió en Twitter Michael Kozak, subsecretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental.
“Esperamos con interés trabajar con ella y otras autoridades civiles del país mientras organizan elecciones libres y justas lo antes posible de acuerdo con la Constitución”, dijo Kozak.
El embajador de Estados Unidos ante la OEA, Carlos Trujillo, consideró ridículo hablar de golpe de Estado en Bolivia cuando varios países pidieron pasar la página.
“Si alguna vez hubo una amenaza para la democracia, esa era la del gobierno liderado por el ya ex presidente Morales”, señaló el diplomático.
“Una fuerte señal a Venezuela”
El presidente Donald Trump consideró que la salida de Morales preserva la democracia en Bolivia y es un mensaje para los regímenes de la región.
“Estos acontecimientos lanzan una fuerte señal a los regímenes ilegítimos en Venezuela y Nicaragua de que la democracia y la voluntad del pueblo siempre prevalecerán”, aseguró Trump en un texto.
El mandatario dijo que con la caída de Morales, el continente americano está un paso más cerca de ser plenamente democrático, próspero y libre. También destacó el papel de las fuerzas militares bolivianas.
“Estados Unidos aplaude al pueblo boliviano por exigir libertad y a los militares bolivianos por acatar su juramento de proteger no solo a una sola persona”, aseveró Trump.
Alberto Fernández, presidente electo de Argentina, consideró que el mensaje de Trump es un retroceso histórico.