El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, afirmó este domingo que Ankara no puede «quedar en silencio ante las provocaciones». Esto, tras la incursión de fuerzas israelíes en la mezquita Al Aqsa de Jerusalén.
Las palabras fueron dirigidas a su homólogo israelí, Isaac Herzog. Erdogan afirmó en una conversación telefónica que la violencia desatada hirió «la conciencia de toda la humanidad».
También enfatizó que no puede permanecer en silencio ante las amenazas contra el estatus y la espiritualidad de Al Aqsa. Así recoge un comunicado de la Presidencia turca.
Erdogan señaló que este es un período delicado, el mes de Ramadán que coincide con la Pascua, y que no se debe permitir que aumenten las tensiones. Estas ya se extienden a Gaza y Líbano.
Erdogan responde tras violencia en Al Aqsa
Además, afirmó que las llamadas de grupos judíos radicales para asaltar Al Aqsa han aumentado las preocupaciones.
Destacó la importancia de tomar las medidas necesarias para que los musulmanes puedan orar sin problemas.
El presidente de Turquía expresó que es necesario evitar que estas situaciones se repitan y abogó por una paz justa y duradera.
La llamada se produjo después del intercambio de fuego entre el Ejército israelí y milicias palestinas en la Franja de Gaza y el sur de Líbano.
Esto desencadenó un enfrentamiento en la madrugada del miércoles entre policías israelíes y fieles palestinos en Al Aqsa.
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