Un buque hospital de la Marina de Estados Unidos partirá en junio hacia Latinoamérica y el Caribe para ayudar a sus socios a aliviar el impacto de la crisis de Venezuela.
Durante cinco meses, el buque hospital USNS Comfort ayudará a aliviar la tensión en los sistemas médicos de los países que albergan venezolanos que huyeron de la crisis, indicó en un boletín el Comando Sur, con sede en Miami.
La misión tiene el propósito de apoyar a «los venezolanos desplazados que continúan huyendo de la brutal opresión del anterior régimen de [Nicolás] Maduro», dijo su comandante, almirante Craig Faller.
El Comando Sur indicó en el escrito que uno de los 10 comandos combatientes unificados del Departamento de Defensa estadounidense informará más adelante los puertos en los que atracará el barco.
El vicepresidente estadounidense Mike Pence anunció en Washington el futuro despliegue del USNS Comfort, en un discurso en el que renovó el llamado a los altos mandos militares de Venezuela a desobedecer a Maduro y a ponerse a la orden de Juan Guaidó, presidente interino del país.
Informó que Washington levantó «con efecto inmediato» las sanciones económicas contra el ex jefe de inteligencia de Venezuela Christopher Figuera, luego de que el oficial apoyó la semana pasada un alzamiento contra Maduro.
La presión sobre Maduro y el empeoramiento de la situación económica y política en la nación han ocasionado la salida del país de más de 3 millones de venezolanos desde 2015, de acuerdo con la ONU.
En octubre, el buque hospital estadounidense inició una gira con la misma misión, que lo llevó a dar soporte a los sistemas de salud de Ecuador, Perú, Colombia y Honduras.
De 272 metros de eslora, el USNS Comfort integra la flota de la Marina estadounidense como buque no combatiente y, como tal, no lleva armas ofensivas.