El caso de Jeffrey Epstein, el magnate estadounidense acusado de tener una red de tráfico de menores en el mundo de élite, dejó perplejo al mundo entero, sobre todo en las últimas horas, cuando salieron a la luz los documentos que muestran cómo el financiero, que se quitó la vida en 2019 mientras se encontraba en prisión, usaba sus contactos para distribuir a sus víctimas.
Todo comenzó cuando, hace algunas semanas, la jueza Loretta Preska emitió una orden para publicar, en el plazo de 14 días, los nombres que aparecen en los documentos judiciales de la investigación iniciada tras la denuncia de Virginia Giuffre, una de las testigos clave y víctimas del pedófilo.
Jeffrey Epstein fue condenado por una red de tráfico de menores
Ricos, poderosos y famosos eran características los hombres con los que Jeffrey lograba sus conexiones para cometer sus delitos y encubrirlos. Los nombres de varias de las personas que salieron a la luz en las últimas horas sorprendieron a todos, entre ellos, Bill Clinton, el expresidente de Estados Unidos, quien aparece en hasta cincuenta páginas de aquellas actas y bajo el pseudónimo John Doe 36.
Ante la repercusión de los hechos, Hillary y Bill Clinton decidieron actuar en consecuencia y se refugiaron en Punta Cana, precisamente en la casa de Julio Iglesias, un gran amigo desde hace décadas. Ante la embarazosa situación, el cantante español le habría cedido su propiedad para que la pareja pase desapercibida por la prensa.
La mansión cuenta con más de 450 hectáreas, en las que se incluyen siete habitaciones, ocho baños, una piscina y un increíble estudio de grabación llamado “Las Cuatro Lunas”.
La enorme casa de Julio Iglesias en Punta Cana
Cuando el escándalo se destapó, Clinton se defendió públicamente y dijo, a través de un vocero, que aunque viajó varias veces en el avión privado del financiero, nunca visitó sus casas, no tenía conocimiento de sus delitos y no volvió a hablar con él desde que ingresó a prisión.
Los documentos recientemente desclasificados, además, incluyen menciones de la pasada amistad entre Epstein y Clinton, quien no está acusado de ningún delito, y del vínculo que tenía con el príncipe Andrés de Inglaterra, quien ya zanjó una demanda en la que se le acusaba de haber mantenido relaciones sexuales con una chica de 17 años que viajó con Epstein.
(FILES) Luego de la muerte del magnate, su exnovia Ghislaine Maxwell, pasó a ser el centro de atención de la justicia y hoy enfrenta una pena de 20 años. Foto: Handout / US District Court for the Southern District of New York / AFP
Cabe destacar que luego de la muerte del magnate, su exnovia y socia, Ghislaine Maxwell, pasó a ser el centro de atención de la justicia. La hija menor del magnate de la prensa británica, Robert Maxwell, fue arrestada en julio de 2020 bajo sospecha de haber ayudado en la red de menores dirigida por Epstein, al reclutar y preparar a víctimas que se sabía que eran menores de edad.
En diciembre de 2021, un jurado de la ciudad de Nueva York la declaró culpable de cinco de seis cargos, incluido el más grave: el de tráfico sexual de una menor. Debido a esto, la mujer enfrenta 20 años de cárcel.
Virginia Roberts Giuffre, una de las víctimas. Foto: AP / Bebeto Matthews
“Ghislaine controlaba a las chicas. Era como la madame”, dijo en aquel entonces Sarah Ransome, una de las mujeres abusadas por Epstein durante la primera década de los años 2000, en diálogo con la BBC.
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