La esposa del capo mexicano Joaquín el Chapo Guzmán, Emma Coronel, que cumple condena de tres años en una cárcel de Estados Unidos por participar en el negocio de narcotráfico de su marido, saldrá en libertad en septiembre de 2023, de acuerdo con la Agencia Federal de Prisiones (BOP, por sus siglas en ingles).
El BOP actualizó este jueves el expediente de Coronel, con ciudadanía estadounidense y mexicana, y fijó la fecha de su salida: el 13 de septiembre del año próximo.
De acuerdo con la abogada Mariel Colón, parte del equipo de defensa de Coronel, su cliente cumplirá 31 de los 36 meses a los que fue sentenciada en noviembre porque a nivel federal solo se cumple el 85% de la condenas.
«Eso aplica a todo el mundo a nivel federal», dijo a Efe la abogada puertorriqueña. Añadió que a la condena se le han restado los 10 meses que pasó Coronel en custodia, sin derecho a fianza, desde que fue detenida en febrero del 2021 en el aeropuerto Dulles de Virginia, hasta que la sentenciaron.
Emma Coronel se declara culpable
El junio de ese año, Coronel, ahora de 32 años de edad, se declaró culpable de cooperar con el negocio de narcotráfico de Guzmán Loera -quien cumple cadena perpetua en Estados Unidos- para la importación de cocaína, heroína, marihuana y metanfetamina a este país y para el blanqueo de dinero.
También de otro delito relacionado con las operaciones financieras en las propiedades comerciales y residenciales del Chapo, todo ello a lo largo de su matrimonio con el exjefe del Cartel de Sinaloa, con quien se casó en 2007, cuando ella cumplió 18 años de edad.
El acuerdo con la Fiscalía, al declararse culpable, le permitió beneficiarse de una reducción de sentencia, que según la Fiscalía federal resultó una condena menor porque su participación fue «mínima» en el engranaje de una gran organización criminal.
Durante el juicio a su marido salió a relucir que ayudó en la espectacular fuga de Guzmán Loera a través de un túnel de una prisión en México en 2015 y en otras actividades ilícitas.
Vida
Coronel, que tiene hijas gemelas de 10 años con Guzmán Loera, fue el centro de atención durante el juicio a su marido en Nueva York y por su vida ostentosa, como el cumpleaños número 7 que celebró a sus hijas inspirado en la muñeca Barbie, cuyas fotos publicó en Instagram.
Ahora, lejos de esa vida, Coronel aguarda por el reencuentro con sus hijas y su familia, con quienes mantiene comunicación telefónica porque debido a la pandemia de covid-19 las visitas a la prisión están prohibidas.
No obstante, de acuerdo con la abogada Colón, seis meses antes de quedar en libertad, Coronel podrá acogerse a un programa que únicamente se aplica a reos que son ciudadanos, que le permitirá salir durante el día y regresar a dormir a una instalación penitenciaria, período en el que se prepara a los presos para reinsertarse a la vida en libertad.
Coronel estará sujeta a cumplir además cuatro años de libertad supervisada como parte de su condena, que también incluye devolver 1.5 millones de dólares de las ganancias del contrabando de drogas de su marido.
«Ella está lista para salir», afirmó Colón, que mantiene comunicación con Coronel, lndicó que desconoce dónde se radicará.
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