Boris Johnson, primer ministro británico, lanzó otra ofensiva este jueves para lograr anticipar las elecciones negadas por el Parlamento este miércoles. Anunció que organizarán nuevas votaciones el lunes.
El gobierno dio la noticia un día después de que la Cámara de los Comunes rechazó organizar comicios anticipados el 15 de octubre. «Prefiero estar muerto», dijo Johnson al verse presionado por los diputados a aplazar otra vez el Brexit.
Johnson precisó desde Dowing street que se tratará de una propuesta del mismo tipo, por lo que requerirá el apoyo de dos tercios de los diputados. No obstante, pondrá a la oposición ante la disyuntiva de volver a rechazar unos comicios que llevan mucho tiempo prometiendo a sus votantes.
Aseguró no querer elecciones, pero considera que es el único camino a seguir. «No quiero elecciones, pero francamente no veo otra manera», afirmó.
«Es el único camino a seguir para nuestro país: tenemos que resolver este asunto de la UE. Tenemos que salir de la UE el 31 de octubre», advirtió.
Durante un evento en una academia de policía en Yorkshire, el norte económicamente desfavorecido y mayoritariamente probrexit de Inglaterra, aseguró: «Prefiero estar muerto en una zanja» que pedir otro aplazamiento.
Dimite su hermano
Johnson necesita que los votantes le den un nuevo mandato luego de las humillantes derrotas que le infligió el Parlamento.
La Cámara de los Comunes aprobó el miércoles una ley que obliga al gobierno a solicitar otra prórroga del Brexit, hasta el 31 de enero. Esto en el caso de que para el 19 de octubre no tenga un acuerdo aceptable con Bruselas o la aprobación del Parlamento para una salida dura.
El jefe del gobierno recibió el jueves un golpe personal cuando Jo Johnson, su hermano menor, anunció que dejaba el Ejecutivo y el Parlamento por la tensión irresoluble que le genera su «lealtad familiar» y «el interés nacional».
El referéndum en 2016 decidió que el Brexit debía ser en marzo. El reiterado rechazo del Parlamento al acuerdo negociado por Theresa May hizo que se retrasara hasta finales de octubre.
Johnson llegó al poder en julio prometiendo que sacaría al país de la Unión Europea con o sin acuerdo. Se niega a pedir otra prórroga.
Se comprometió a no bloquear la nueva ley sobre el aplazamiento en la Cámara Alta, donde debe ser aprobada el viernes como una medida para convencer a la oposición.
«El problema es que en este momento no podemos confiar en que Boris Johnson cumpla con cualquier compromiso», aseguró el laborista John McDonnell, a la BBC.