El voto latino jugará un papel muy decisivo en estados en los que no parece haber un ganador definido como Pensilvania, Ohio, Nevada, Virginia y Florida. Allí los votantes hispanos son una minoría pero serán un voto que los candidatos, Donald Trump y Joe Biden, necesitarán para ganar.
Florida es uno de los estados que puede determinar quién ganará las elecciones en Estados Unidos. ¿Qué dicen las encuestas sobre el razonamiento detrás de que Florida sea tan fundamental?
«Florida es esencial, especialmente para los republicanos, en el sentido de que realmente necesitan ese estado, pero también es clave para los demócratas. Y mirando estas elecciones, si Biden gana Florida se puede asumir que él tiene las elecciones, que este es realmente un estado que el presidente Trump debe mantener en su esquina. Ganó la última vez por un punto porcentual. Y necesitará a Florida para ganar esta elección», precisó Doug Schwartz, director de la encuesta de la Universidad de Quinnipiac.
Trump y Biden, las encuestas
En este momento, Biden lidera a Trump a nivel nacional y en algunos estados clave en el campo de batalla. La encuesta nacional más reciente tiene al candidato demócrata a la cabeza del aspirante a la reelección en 10 puntos porcentuales. Entre los hispanos, Biden, tiene el apoyo de 63% de los posibles votantes latinos, comparado con 29% que se inclina por la reelección del presidente Trump, según una encuesta del Pew Research Center.
Estos registros es una instantánea en el tiempo. Las cifras pueden cambiar entre ahora y las elecciones. Es importante estar atento a los estados del campo de batalla, que en última instancia determinarán al ganador.
Hay algunos estados que son confiablemente rojos o azules. Por ejemplo, «California y Nueva York definitivamente votarán por Biden; Kentucky y Mississippi definitivamente votarán por Trump», dijo a El Nacional Schwartz, durante una conferencia virtual en la gira electoral del Centro de Prensa Internacional de Estados Unidos.
Los colegios electorales
A cada estado se le asigna un cierto número de votos del colegio electoral en función del tamaño de la población del estado. En casi todos , el que gane la mayoría de los votos en esa entidad obtendrá todos los votos del colegio electoral.
Un candidato necesita 270 votos del colegio electoral para ganar las elecciones. El premio más grande, por ejemplo, es California con 55 votos electorales. «Es confiablemente azul y predecible que el demócrata gane el estado», consideró el experto. Pero un estado como Florida no es tan predecible, y tiene 29 votos electorales; por eso se está viendo tanto enfoque en Florida, así como en otros estados donde se pueden decidir las elecciones.
Schwartz explicó que este sistema «a veces puede resultar en una división entre el ganador del voto popular y el ganador del colegio electoral», que es lo que sucedió en 2016. «El hecho de que Hillary Clinton ganó el voto popular, pero perdió la elección en general, contribuyó a la percepción de que las encuestas fueron lejos porque la mostraron ganando», agregó.
Las elecciones presidenciales se deciden estado por estado. Entonces, para este ciclo electoral una encuesta de la Universidad de Quinnipiac la semana pasada muestra a Biden ampliando sus ventajas en Pensilvania y Florida. Estos son estados en los que Trump ganó por aproximadamente un punto porcentual en 2016. Actualmente, Biden está por delante en Florida por 11 puntos.
En Pensilvania, el candidato demócrata tiene 13 puntos de ventaja. Ohio, sin embargo, muestra la carrera esencialmente empatada, pero sigue siendo un gran cambio con respecto a los resultados de 2016 cuando Trump ganó el estado por ocho puntos. En Georgia, Biden lidera por siete puntos. Otro gran cambio con respecto a las elecciones de 2016, cuando Trump ganó el estado por cinco puntos.
Los latinos
Estos resultados son después del primer debate y luego del diagnóstico de covid-19 del presidente Trump. Entonces, es posible que esto sea algo temporal para Biden. Pero también es posible que mantenga su liderazgo.
El 3 de noviembre los latinos serán por primera vez el segundo mayor grupo de votantes, solo por detrás de los blancos no hispanos, con 32 millones de electores, según Pew. Su influencia es cada vez mayor en el resultado.
El voto latino en 11 días podrá ser uno de los factores más importantes en el destino político de Estados Unidos, si las personas elegibles salen a votar en estas elecciones presidenciales.