El terrorismo y el radicalismo de extrema derecha representan actualmente el principal peligro para la democracia en Alemania. Así estimó este jueves Thomas Haldenwang, responsable de los servicios internos de inteligencia.
Después de varios atentados cometidos en el país por adeptos de esta ideología radical, Haldenwang anunció que el ala más dura del partido de extrema derecha, Alternativa por Alemania, principal fuerza de oposición en la Cámara de diputados, pasaría a estar bajo vigilancia policial.
«Hoy sabemos que las democracias pueden fracasar cuando sus enemigos las destruyen desde dentro, es una advertencia que nuestra historia nos envía«, agregó Thomas Haldenwang en rueda de prensa sobre el terrorismo y la extrema derecha.
El responsable subrayó que el movimiento de extrema derecha más radical en el país tiene actualmente unos 32.000 simpatizantes. Una cifra en fuerte que va en aumento, de los que 13.000 personas están dispuestas a la violencia.
En este contexto, el jefe de los servicios internos de inteligencia alemanes, la Oficina de protección de la Constitución, anunció que se pondrá bajo vigilancia policial al ala ultra del la AfD. Ese partido es la principal fuerza de la oposición en el Parlamento nacional.
Ese movimiento, llamado El Ala, está dirigido por Björn Höcke, jefe de filas del AfD en la región de Turingia. Hace poco, estuvo en el centro de una polémica al haber intentando aliarse con la derecha moderada de la canciller Angela Merkel.
En Alemania, únicamente se decreta el control policial para las organizaciones más extremas, consideradas un peligro potencial para el Estado.
Los servicios internos de inteligencia explicaron que habían constatado que El Ala y sus responsables podrían ser calificados de extremistas. Además, pusieron en cuestión en sus discursos y acciones símbolos fuertes del régimen democrático alemán, aunado de la dignidad humana y el Estado de derecho.
Höcke y sus seguidores rechazan la cultura del arrepentimiento por los crímenes nazis. Al mismo tiempo, defienden que existe una amenaza de que la población alemana autóctona pueda quedar reemplazada por los inmigrantes.