El secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, fue denunciado públicamente este jueves por haber ocultado su cáncer y hospitalización, un tema que provocó indignación en el país.
«Quiero ser muy claro. No manejamos esto bien. Yo no gestioné esto bien», dijo en rueda de prensa.
«Debería haber informado al presidente de mi diagnóstico de cáncer. También debería habérselo dicho a mi equipo y a los estadounidenses. Asumo toda la responsabilidad. Pido disculpas a mis compañeros y a la población estadounidense», añadió.
Pero «quiero dejar muy claro que no hubo vacíos en las autoridades ni riesgos para el mando y control del departamento», recalcó.
Austin fue muy criticado cuando se supo que había sido hospitalizado y que su estado se había mantenido en secreto, en contra de los protocolos vigentes.
Todo ello en un momento en el que la primera potencia militar mundial sigue de cerca dos guerras: en Ucrania y en la Franja de Gaza.
El presidente Joe Biden no supo nada del diagnóstico de cáncer durante semanas, según la Casa Blanca.
El asunto provocó estupor incluso entre los demócratas y algunos republicanos pidieron la dimisión del secretario de Defensa, quien trató de amainar los ánimos.
«Me estoy recuperando bien, pero como pueden ver todavía estoy convaleciente», declaró a los periodistas. «Aún tengo algo de dolor en la pierna», dijo, y precisó que hace fisioterapia para superarlo.