El presidente de Corea del Sur, Yoon Suk-yeol, anunció este martes la anulación de la ley marcial que había decretado horas antes, luego de una reunión extraordinaria de su gabinete. Durante su discurso televisado de madrugada, confirmó que las tropas encargadas de aplicarla ya se habían replegado a sus cuarteles.
La decisión siguió a una votación en el Parlamento surcoreano que revocó la medida, conforme a lo establecido en la Constitución. A las 4:30 horas locales (19:30 GMT), el gobierno aprobó formalmente la moción para levantar la ley marcial, que estuvo en vigor por cerca de seis horas.
El anuncio llegó en medio de fuertes críticas nacionales e internacionales. Horas antes, Estados Unidos había pedido una resolución «pacífica» y «respetuosa del Estado de derecho» para la crisis. La declaración de la ley marcial desató protestas masivas frente a la Asamblea Nacional, donde miles de manifestantes exigieron la dimisión de Yoon.
La justificación del presidente de Corea del Sur
El mandatario justificó la medida como una defensa del «orden constitucional», acusando al opositor Partido Democrático (PD) de promover actividades «antiestatales». Sin embargo, la Asamblea Nacional, dominada por el PD, votó rápidamente para anular la medida, con 190 votos a favor, informó Efe.
La crisis se enmarca en un contexto de confrontación entre el gobierno y la oposición, exacerbado por la reciente aprobación de presupuestos para 2025 y mociones para destituir altos funcionarios, iniciativas lideradas por el PD sin apoyo del oficialismo. Yoon, cuyo mandato ha enfrentado una oposición constante desde mayo de 2022, calificó la situación como «sin precedentes» en la política del país.
La ley marcial, la primera declarada desde los años ochenta, sorprendió al país y fue criticada incluso por aliados políticos de Yoon, como el líder de su partido, Han Dong-hoon, quien la calificó de «error» y prometió trabajar con la ciudadanía para detenerla.
La comunidad internacional expresó preocupación. Estados Unidos confirmó que no fue informado sobre la medida y resaltó la necesidad de respetar la decisión del Parlamento. La ONU también manifestó estar observando la situación con inquietud.
En el ámbito económico, la moneda surcoreana, el won, mostró una ligera recuperación tras la votación parlamentaria, moderando la caída sufrida durante las tensas horas de la crisis.
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