El gobierno argentino dijo este viernes que pretende convocar a las asociaciones periodísticas para establecer cómo hacer la cobertura informativa de las manifestaciones, después de que el jueves una veintena de trabajadores de prensa resultaran heridos en medio de un fuerte operativo de seguridad para disolver una protesta.
«Vamos a hablar con las organizaciones (de prensa). Necesitamos que los periodistas se identifiquen, tengan un chaleco, podamos saber que son periodistas», dijo en rueda de prensa la ministra de Seguridad argentina, Patricia Bullrich.
El jueves, entre una veintena y una treintena de trabajadores de prensa resultaron heridos por disparos de bala de goma y gas pimienta cuando cubrían los enfrentamientos entre fuerzas de seguridad federales, a cargo de Bullrich, y manifestantes, mayormente de izquierda, que protestaban en los alrededores del Congreso en contra del proyecto de ley ómnibus, impulsado por el gobierno de Javier Milei.
Más temprano, en declaraciones radiales, Bullrich afirmó que las fuerzas de seguridad habían advertido a la prensa que saliera de la zona porque entraría en acción para dispersar a los manifestantes.
Piden «garantías» a las fuerzas de seguridad
En la rueda de prensa, la ministra dijo que el gobierno cree que es mejor que los periodistas no estén «entre la manifestación y las fuerzas de seguridad», pero que la prensa alega que «así no quiere trabajar porque no toma las imágenes que quiere».
«En consecuencia, si están en medio de la situación, es muy difícil distinguirlos. Quizás sería bueno que el mismo periodismo, a través de sus organizaciones, como el Foro de Periodismo Argentino (Fopea), la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (Adepa) o las que sean, tengan un distintivo y traten de tener un lugar en el que, en los momentos en los que pueda haber una situación un poco más tensa, las fuerzas de seguridad puedan saber perfectamente quién es quién», señaló.
Las lesiones sufridas por la prensa el jueves y también el miércoles -primer día de debate en el Congreso de la ley ómnibus- fueron repudiadas por diputados opositores y por entidades periodísticas.
En un comunicado, el Fopea reclamó «garantías» a las fuerzas de seguridad y exigió que «se permita el trabajo de cobertura periodística a los cronistas sin que sean víctimas de injustificados ataques».
«Varios colegas y trabajadores de prensa denunciaron heridas con balas de goma (…). También durante ambas jornadas colegas que estaban transmitiendo en vivo sufrían reproches e insultos dirigidos a su trabajo», señaló el Fopea.
El Sindicato de Prensa de Buenos Aires dijo haber contabilizado 30 casos de trabajadores de prensa «de medios públicos, privados y autogestivos con impactos de bala de goma, golpes y daños provocados por gases lacrimógenos», muchos de los cuales tuvieron que ser atendidos por personal médico.
Al tiempo, reclamó la libertad de prensa como «pilar fundamental de la democracia que debe ser defendido, garantizado y respetado por todos los poderes del Estado».
El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!
Apoya a El Nacional