El área destruida por los incendios forestales en Brasil saltó 260,5% en enero de 2024 en comparación con el mismo mes del año pasado, hasta 10.298 kilómetros cuadrados, un territorio equivalente al de un país como el Líbano, informó este martes la plataforma MapBiomas.
El salto se debe a la histórica sequía que el país registra desde septiembre del año pasado, principalmente en la Amazonía, como consecuencia de los efectos del fenómeno El Niño y de la crisis climática, según Mapbiomas, red formada por 70 entidades, entre universidades, ONG y empresas de tecnología.
Las áreas más afectadas por las llamas fueron las formaciones campestres (40,5% del total), los pastizales (25,5%) y los bosques (17%), de acuerdo con el Monitor del Fuego de Mapbiomas, una herramienta que monitorea los cambios en la cobertura y uso de la tierra en Brasil con la ayuda de imágenes por satélite.
El bioma brasileño con más áreas consumidas por el fuego en enero fue la Amazonía, con 9.415 kilómetros cuadrados incinerados, el 91,42% del total.
El área destruida por el fuego en la Amazonía saltó 266%, en comparación con la de enero del año pasado.
Los siguientes biomas más afectados fueron el Pantanal, con 406 kilómetros cuadrados quemados, y el Cerrado (la sabana brasileña), con 319,7 kilómetros cuadrados.
Para el salto del área destruida por el fuego en la Amazonía contribuyó especialmente la situación en Roraima, estado brasileño en la frontera con Venezuela y en donde la extensión quemada saltó 250%, hasta 4.141,7 kilómetros cuadrados en enero de este año.
El área destruida por los incendios en Roraima en enero equivale a 40% de la de todo el país.
Los datos corresponden al estudio mensual de incendios en Brasil que realiza Mapbiomas desde 2019 con base en imágenes satelitales y que revela, casi en tiempo real, la ubicación y extensión de las áreas quemadas.