La jefe del Ejecutivo de Hong Kong, Carrie Lam, admitió este lunes que los resultados de las elecciones con una victoria aplastante del bloque prodemocrático, refleja la decepción de la gente por la situación de la ciudad debido a las protestas de los últimos meses.
En un comunicado, Lam manifestó que el gobierno respeta el resultado electoral y escuchará humildemente las opiniones de la gente y reflexionará con seriedad.
Al cierre del escrutinio este lunes, los partidos alineados con Pekín, a los que Lam está vinculada, solo consiguieron la victoria de 59 concejales de distrito, según el resultado provisional, frente a los 300 que tenían antes.
Los comicios registraron el mayor número de votantes en la historia con una participación récord de 71,2%, casi 3 millones de sufragios en una ciudad de 7,5 millones de habitantes.
«El gobierno fortalecerá la cooperación con los concejales para resolver los problemas de los distritos que preocupan a la gente», señaló Lam sobre los nuevos cargos electos que asumirán el 1º de enero de 2020.
Los partidos prodemocráticos lograron una victoria de 388 concejales de distrito de un total de 452, lo que podría deberse al descontento de la sociedad hongkonguense con el desempeño del gobierno de Lam.
Reclamo ciudadano
Millones de manifestantes han protestado desde junio contra un proyecto de extradición a China, anulado meses después, aunque a las protestas luego se sumaron nuevas demandas que incluyen el sufragio universal y mayor autonomía, aumentando la presión sobre Lam.
El resultado a favor de los prodemócratas implica que ellos controlarán los 117 asientos de concejales de distrito que se incluyen entre los 1.200 miembros del comité que elegirá, en 2020, al próximo jefe del Ejecutivo de Hong Kong, tradicionalmente dominado por los aliados de Pekín.
Las elecciones se celebraron en un ambiente de calma, sin disturbios importantes. Por primera vez en la historia las urnas estuvieron vigiladas por más de 30.000 funcionarios de seguridad.