Estados Unidos (EE UU) y Vietnam afirmaron este sábado su voluntad común de fortalecer sus lazos diplomáticos en un contexto de tensiones regionales sobre Taiwán.
El secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, que hizo escala en Hanói antes de una reunión en Japón de los ministros de Relaciones Exteriores de los países del G7, se reunió el sábado con dirigentes vietnamitas para hablar de una «asociación estratégica».
Las relaciones entre Estados Unidos y Vietnam se han fortalecido en los últimos años, incluso en el ámbito militar y económico. Los dos países se han reconciliado ampliamente a pesar de la herencia de la guerra (1954-1975).
Cada uno de ellos está preocupado por el creciente peso de China en la región. «Creemos que es un buen momento para mejorar nuestra asociación existente», dijo a los periodistas Blinken.
«En los últimos diez años hemos tenido una asociación completa que ha creado una base increíblemente sólida para la cooperación en muchas áreas diferentes. Por lo tanto, creemos que es el momento adecuado para ir aún más lejos», añadió.
El presidente estadounidense Joe Biden había tenido una entrevista telefónica el mes pasado con el jefe del partido comunista en el poder en Vietnam, Nguyen Phu Trong, con el fin de elevar las relaciones a una asociación «estratégica».
Hanói podría mostrarse más reservado, preocupado de no ofender a Pekín, su vecino del norte y otro socio económico clave, a pesar de las pretensiones rivales en el mar de China Meridional, estiman los analistas.
El primer ministro vietnamita, Pham Minh Chinh, dijo a su vez que Hanói dio luz verde a «un fortalecimiento de las relaciones bilaterales» con Washington.