Estados Unidos vivirá temperaturas más altas de lo normal durante todo el verano, de julio a septiembre, pronosticó el jueves una agencia gubernamental, en momentos en que gran parte del país atraviesa la primera gran ola de calor del año.
«Lo que estamos previendo es que en general gran parte de Estados Unidos, excepto unos pocos lugares, tendrá temperaturas por encima de lo normal«, dijo en conferencia de prensa Johnna Infanti, meteoróloga de la Oficina de Administración Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos. (NOAA).
Pero el pronóstico no ofrece pista alguna sobre posibles fenómenos meteorológicos extremos durante ese período, agregó.
El noreste de Estados Unidos atraviesa una gran ola de calor, justo cuando comienza oficialmente el verano.
Alrededor de 95 millones de estadounidenses están bajo algún tipo de advertencia o aviso por calor.
Según el sitio gubernamental www.heat.gov. Se espera que las altas temperaturas duren hasta el fin de semana, según el Servicio Nacional de Meteorología.
«La llegada temprana del calor en la temporada de verano, la persistencia del calor durante varios días, los vientos ligeros y la nubosidad limitada serán factores agravantes», informó el servicio meteorológico.
«Se insta a quienes no tienen acceso a un aire acondicionado confiable a que encuentren una manera de refrescarse», agregó.
Tormenta tropical y calor extremo
El miércoles, la pequeña ciudad de Caribou, Maine, alcanzó su temperatura récord de 35,5 grados centígrados.
Las ciudades de Nueva York y Washington superaron nuevamente los 30 grados el jueves.
El presidente Joe Biden recibió información sobre el calor extremo.
Así como sobre el impacto de la tormenta tropical Alberto en Texas y Nuevo México, y los incendios forestales en el oeste de Estados Unidos, dijo la Casa Blanca.
El año pasado fue el más caluroso del que se tenga registro, y según la NOAA 2024 tiene 50% de posibilidades de superar esa marca. En cualquier caso, estará sin dudas entre los cinco años más calurosos jamás registrados.
El cambio climático causado por la humanidad está calentando el planeta a un ritmo alarmante, provocando reiteradas e intensas olas de calor, según el consenso científico internacional.
Los expertos de World Weather Attribution (WWA) consideran que el calor mortal que afectó a Estados Unidos, México y Centroamérica a finales de mayo y principios de junio fue 35 veces más probable debido al calentamiento global.