Estados Unidos decidió mantener durante al menos otra semana la suspensión de las vacunas de Johnson & Johnson contra el covid, cuyo retraso en la distribución en Europa será compensado a partir de abril por un flujo de dosis de Pfizer.
En tanto, la Organización Panamericana de la Salud pidió a los países de las Américas aplicar una «estrategia integral» para frenar el nuevo embate pandémico, que afecta en particular a Sudamérica.
Un panel de expertos en salud de Estados Unidos dictaminó que la suspensión del uso de las vacunas Janssen (Johnson & Johnson) continuaría al menos una semana más para tener tiempo de evaluar el riesgo de coágulos sanguíneos. También la suspendió Sudáfrica.
Se trata de siete casos notificados de coágulos entre más de 6,8 millones de dosis de Johnson & Johnson administradas en Estados Unidos.
El martes, J&J, que debe entregar 55 millones de dosis a la Unión Europea en el segundo trimestre, había anunciado que «retrasaría el despliegue» de su vacuna de dosis única en Europa.
Los problemas en Europa de Janssen fueron seguidos con una aceleración de la parte de Pfizer/BioNTech: unas 50 millones de dosis del dúo estadounidense-alemán, previstas inicialmente para el cuarto trimestre, llegarán a partir de abril, lo que elevará a 250 millones las dosis en el segundo trimestre, anunció la Comisión Europea.
Además, la UE abrió negociaciones formales con BioNTech y Pfizer para encargar 1.800 millones de dosis adicionales de las llamadas vacunas de «segunda generación» para combatir las variantes actuales y futuras del coronavirus, dijo la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen.
Más de 820 millones de dosis de vacunas se han administrado en todo el mundo, pero las dificultades de acceso y la seguridad de las dosis han golpeado las esperanzas de salir pronto de la pandemia, que ha matado a cerca de tres millones de personas y devastado la economía mundial.
La Agencia Europea de Medicamentos anunció que se pronunciará sobre la vacuna Janssen la semana que viene.
Esta situación ya la ha padecido la vacuna de AstraZeneca, cuyo uso fue limitado en varios países a las personas mayores después de casos aislados de coágulos de sangre entre los más jóvenes, algunos fatales.
Y este miércoles Dinamarca se convirtió en el primer país europeo en decidir abandonar definitivamente la vacuna de AstraZeneca, a pesar de que la EMA y la Organización Mundial de la Salud (OMS) la recomiendan.
Recuperación «más dura»
En Washington, la directora de la OPS, Carissa Etienne, hizo un llamado a «detener la transmisión» del virus.
«Más personas se han infectado con covid en nuestra región en los últimos siete días que la mayoría de los promedios semanales de casos que vimos el año pasado. Y nuestras muertes semanales superan en número a las de cualquier semana en 2020», dijo Etienne.
Aunque menos afectada que Europa, América Latina (26,5 millones de casos y más de 841.000 muertes) tendrá una recuperación «más dura», dijo en entrevista con la AFP la secretaria general iberoamericana, Rebeca Grynspan.
Argentina, que registró 25.000 nuevos contagios este miércoles frente a los 6.000 de hace un mes, anunció una extensión de la prohibición a la circulación nocturna, una restricción del horario comercial y el cierre de las escuelas en el área metropolitana de Buenos Aires.
«Todos los esfuerzos parecen insuficientes a la luz de los contagios», advirtió el presidente argentino, Alberto Fernández, mientras los hospitales de su país se van quedando sin camas de terapia intensiva y con un personal médico exhausto.
En la terapia intensiva del hospital público El Cruce Dr. Néstor Carlos Kirchner, en la provincia de Buenos Aires, el ritmo frenético no ha cambiado más de un año después de que la enfermedad llegara a Argentina.
«No hemos parado desde marzo, en este momento estamos viendo un rebrote de la curva y una necesidad cada vez mayor de camas sobre todo para gente joven y en situación muy grave», explica a la AFP, Néstor Pistillo, jefe de terapia intensiva del hospital.
De su lado, Perú reimpuso la cuarentena dominical obligatoria en Lima y otras zonas del país a partir de la próxima semana ante el incremento de los contagios y decesos por covid-19.
Y Brasil, el país más afectado de Latinoamérica por la pandemia, informó que más de 1,5 millones de brasileños que debió recibir la segunda dosis de la vacuna anticovid aún no lo ha hecho.
Tercera ola en Europa
Europa superó un millón de muertes de covid esta semana y está en plena tercera ola, afectada con la variante británica, más contagiosa.
En el hospital de Freising, en Baviera, sureste de Alemania, los pacientes son mucho más jóvenes, «la mayoría tiene entre 40 y 60 años», afirma Thomas Marx, de 42 años, director médico de la unidad de cuidados intensivos.
Alemania, Francia, Italia, España y otros países todavía están bajo serias restricciones.
Pero en Bélgica, cafés y restaurantes obtuvieron luz verde para abrir sus terrazas a partir del 8 de mayo tras un ligero alivio de los casos. Suiza también anunció que podrían reabrir el lunes.