El alcalde de Rockport, la ciudad de Texas en la que Harvey tocó tierra convertido en un huracán de categoría 4, aseguró que el ciclón ha dejado una “devastación generalizada” en su comunidad, donde algunos edificios quedaron destruidos.
En declaraciones a The Weather Channel, el alcalde de la localidad afectada, Charles Wax, señaló que “algunas casas, escuelas y negocios fueron fuertemente dañados o destruidos”.
Harvey, el huracán más poderoso que llega a Estados Unidos desde el Katrina en 2005, tocó tierra en la localidad de Rockport, con vientos máximos sostenidos de 215 km/h.
Wax indicó además que el servicio de emergencias de su ciudad se vio afectado “por problemas en las conexiones telefónicas y otras formas de comunicación”.
Brock Long, jefe de la agencia federal de emergencias de Estados Unidos dijo que a los pueblos y ciudades golpeados por el huracán Harvey les tomará años recuperarse de la devastación causada por esa enorme tormenta.
Medios locales reportaron acerca de los primeros rescates de personas atrapadas en un centro de ancianos en Rockport, un edificio en el que el techo fue destruido.
Los heridos fueron llevados a un hospital improvisado en una cárcel local para ser evaluados y tratados.
El huracán Harvey se degradó a categoría 1 y se desplaza sobre Texas con vientos máximos sostenidos de 120 km/h y con lluvias torrenciales, informó el Centro Nacional de Huracanes.
En un boletín especial el centro meteorológico da cuenta del debilitamiento del huracán, el cual se espera que se degrade a tormenta tropical en el transcurso de las próximas horas, cuando aún estará serpenteando en tierra, sobre el suroeste de Texas.
Otra de las ciudades afectadas durante la llegada del ciclón fue Corpus Christi, a 48 kilómetros de Rockport y donde las autoridades recomendaron a sus habitantes reducir el uso del agua corriente por culpa de los cortes de energía en las plantas de tratamiento de aguas residuales.
El alcalde Joe McComb indicó que a pesar de que los cortes de energías son considerables, la cantidad de lluvias y tormentas “no es tan alta como se esperaba”.
Sin embargo, McComb reconoció que los fuertes vientos causaron gran cantidad de daños materiales.
Cerca de 300.000 personas en Texas se quedaron sin electricidad por el paso del huracán, informó el Consejo de Fiabilidad Eléctrica de Texas, que administra el flujo de 90% de la carga eléctrica del estado sureño.
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