Estados Unidos sancionó a 15 miembros del Cartel de Sinaloa y a 6 empresas con sede en México implicados en el lavado de dinero en el mercado negro del tráfico de fentanilo, informó este viernes el gobierno estadounidense.
La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro sancionó a agentes de un esquema de cambio de pesos en el mercado negro (BMPE) «para lavar millones en ganancias ilícitas de fentanilo para el Cartel de Sinaloa», anunció en un comunicado.
Entre los sancionados figuran la empresa de telefonía celular con sede en México Smart Depot y los hermanos Arturo D’Artagnan Marín González y Porthos Marín González.
Según Washington, los hermanos Marín negociaron las ventas de fentanilo en Estados Unidos y utilizaron las ganancias, principalmente en dólares, para comprar teléfonos celulares a empresas estadounidenses.
Una vez transportados a México, los teléfonos se vendieron en las tiendas de Smart Depot, un negocio que fue prosperando permitiendo que los traficantes del Cartel de Sinaloa recibieran las «ganancias ilícitas en su moneda nacional», dice el texto.
El gobierno «seguirá utilizando todas las herramientas a (su) disposición para atacar a los violentos carteles de la droga que se benefician de las mortíferas ventas de fentanilo», advirtió el subsecretario del Tesoro, Wally Adeyemo, quien anunció las sanciones durante un viaje a Arizona (suroeste).
El Tesoro acusa al Cartel de Sinaloa de ser «responsable de una parte importante del fentanilo ilícito y otras drogas mortales traficadas hacia Estados Unidos».
Este opiáceo sintético causa decenas de miles de muertos al año en Estados Unidos, que asegura que se fabrica principalmente en laboratorios narcos en México con sustancias procedentes de China.
Colaboración de México contra el fentanilo
Esta acción, coordinada estrechamente con el gobierno mexicano, también permitió sancionar a agentes de Los Chapitos, como se conoce a los hijos del narcotraficante mexicano Joaquín «el Chapo» Guzmán que dirigen una facción del Cartel de Sinaloa.
Se trata de los proveedores de fentanilo Rolando Verduzco Castro y Jesús Manuel León Valdez (alias el Güero de Las Trancas), Adilene Mayre Robledo Arredondo, quien es cuñada de los hermanos Marín, así como su hermano, Iván Yareth Robledo Arredondo.
A estos dos últimos además les acusa de reclutar a narcotraficantes para participar en el lavado de dinero.
Algunos de los proveedores de fentanilo reclutados fueron Alan Gabriel Núñez Herrera y Jesús Tirado Andrade, también sancionados.
Además de Smart Depot, el Tesoro impuso sanciones económicas a cuatro empresas creadas por Adilene Robledo e Iván Robledo y radicadas en Culiacán, Sinaloa (oeste). Se trata de Bufaluss y Dulce Volcan, del sector alimentario, y las minoristas de ropa Royal Room Dress y Total Look.
«El Mayo»
Aparte de beneficiar a Los Chapitos, los hermanos Marín también blanquearon activos mediante el esquema BMPE para miembros del Cartel de Sinaloa que trabajan para Ismael Zambada García, conocido como el Mayo, quien se encuentra prófugo y fue socio del Chapo Guzmán, que cumple cadena perpetua en Estados Unidos.
Entre ellos figuran Jesús Norberto Larrañaga Herrera (el 30), que trabaja para su suegro, el expolicía Víctor Lizárraga Martínez (el 20), Karla Gabriela Lizárraga Sánchez y los hermanos Alexis Vergara Meza (Wini) y Edy Vergara Meza (Carter). Según el Tesoro, todos ellos coordinan asimismo «la distribución de drogas en todo Estados Unidos».
El 30 «utiliza las ganancias de las drogas ilícitas para comprar armas en Estados Unidos, que trafica a través de la frontera con México por medio de mensajeros» añade.
También fueron sancionados Jorge Alejandro García Velazco, socio de los hermanos Marín en Sonora (noroeste), y su esposa Mayra Gisel González Cordero, así como su negocio de telefonía celular, Celulandia.
Como resultado de las sanciones, todos los bienes y participaciones en bienes de los sancionados que se encuentren en Estados Unidos o que estén en poder o bajo el control de estadounidenses quedan bloqueados.